BRASIL
Ahora sí, a terminar la fiesta que empezó en Brasil 2014
El periodista y panelista de Fox Sports, Alejandro Pino Calad, cree que es posible que la selección Colombia, que juega de local en territorio brasileño, gane esta Copa América.
Nunca le hemos ganado a Brasil en Brasil. Es más, aparte de dos victorias en las Copas América de 1991 y 2015 nunca le hemos ganado un partido oficial al pentacampeón del mundo. Sin embargo, después de lo ocurrido en el Mundial de 2014 los colombianos tenemos todo el derecho a cantar el muy argentino “¡Brasil decime qué se siente, tener en casa a tu papá!”.
La memoria es traicionera, pero feliz y, además, está pintada de amarillo, azul y rojo. Allí, en los sectores de Copacabana e Ipanema, el 28 de junio de 2014, miles de compatriotas celebramos al ritmo de ‘Ras Tas Tás’ la histórica clasificación de nuestra selección, por primera vez, a unos cuartos de final de una copa del mundo, tras haber vencido en el Maracaná a Uruguay por 2 a 0.
Esa noche todos imitamos el movimiento de James Rodríguez para anotar el que sería el mejor gol del Mundial; alguien entonó un “se vive, se siente, Pékerman presidente”; se escuchó un susurro de “Colombia tierra querida…” y todo terminó en un himno colectivo y ensordecedor. Además, de la nada, cajas y botellas de aguardiente colombiano inundaron las calles de Río de Janeiro. Enguayabados y llenos de arena, cientos de hinchas amanecieron en las playas envueltos en sus banderas y sintiéndose en casa. Al final no ganamos el Mundial, la selección brasileña nos eliminó en un partido que aún duele, pero fuimos locales en Brasil 2014.
Lea también: La historia del partido que clasificó a Colombia al Mundial de Brasil 2014
Según el Ministerio de Turismo de Brasil, 31.000 colombianos cruzamos la frontera ese año para acompañar a la selección en la copa del mundo. Las cifras extraoficiales indican que hubo más de 50.000 compatriotas en ese país; a los que entramos legalmente hay que sumar los que ya vivían allá. Por eso en cada ciudad éramos anfitriones. Y allá volvemos cinco años después para tratar de lograr un título.
José Néstor Pékerman se fue del equipo tras llevarnos al Mundial de Rusia 2018, un torneo en el que la selección brilló poco. Al argentino siempre le recriminarán la alineación frente a Inglaterra. La fiesta de 2014 había generado un serio problema, el entrenador se había vuelto dependiente de James y sin él nunca se arriesgó.
Brasil 2019 será el primer examen de la era de Carlos Queiroz al frente de la selección, volverá a tener a Rodríguez como eje del equipo, pero este es otro James. El de hace cinco años era el atrevido volante ofensivo del Mónaco que tras ese Mundial fue adquirido por Real Madrid. El de hoy es una estrella con puntos altísimos y bajos en dos de los mejores equipos de la historia, el merengue y el Bayern Múnich. James pasó de ser ese media punta improvisado como goleador, que enamoró al planeta, a convertirse en un interior izquierdo notable que también puede ir por los costados.
Brasil 2014 lo convirtió en el eje sobre el que gravita la Selección Colombia ante aquella ausencia de Falcao García; y así será en esta Copa América, aunque el Tigre esté de regreso y sea el actual capitán del equipo. El desempeño de Radamel en esta cita puede que marque su ruta por seguir para los próximos años. ¿Llegará a Catar 2022 o ahí estarán los nuevos delanteros como Duván Zapata?
En el certamen volveremos a contar con viejos conocidos como David Ospina, indiscutible en el arco a pesar de que no brilló ni en el Arsenal ni el Nápoli; y Camilo Vargas, que hoy es el segundo arquero. También estarán Juan Guillermo Cuadrado, que tras una maravillosa temporada con Fiorentina y un buen Mundial, pasó por Chelsea para luego graduarse de figura en Juventus; Cristian Zapata, joven escudero de Mario Yepes en aquella defensa que hizo historia en Brasil y que hoy es el veterano de la lista; y Santiago Arias, que desde 2016 se quedó con el puesto de lateral derecho, afianzándose, de paso, en el PSV y el Atlético de Madrid. Pero si comparamos la nómina mundialista de Pékerman en 2014, con la de Queiroz en 2019, notaremos que el equipo es otro y no se sabe muy bien a qué juega.
Le recomendamos: Así se celebra un partido de fútbol al mejor estilo colombiano
¿Defensa de cuatro? Sin duda, pero de aquella idea ofensiva de 2014 con laterales saliendo todo el tiempo, un cabeza de área (Carlos Sánchez), dos volantes externos, un media punta libre y un delantero pivoteador, hemos pasado, al parecer, a una propuesta más conservadora. Esta cuenta con una línea de volantes de más fuerza que técnica (Barrios y Lerma), dos volantes externos con más deberes defensivos que ofensivos, y un delantero solitario acompañado por otro atacante o media punta.
Volvemos a Brasil con las sonrisas de quien se sabe en territorio conocido, con el reto del debut de Queiroz y con la promesa de que la fiesta de hace cinco años podría llegar a un mejor término. A fin de cuentas, si Falcao ya cumplió su sueño de jugar un Mundial y marcar un gol en él después de superar una lesión que no parecía tener fin, ¿por qué no creer que quizá se despida de la Selección Colombia levantando el gran trofeo continental?
*Director de Publimetro Colombia y panelista de Fox Sports Colombia