EL CAMPO
Embalse Calandaima, ¡agua todo el año!
Se construirá en 2018 y permitirá que municipios como Viotá, El Colegio, Apulo y Tocaima tengan agua permanentemente.
En la zona rural de los municipios de Viotá y El Colegio, se construirá el embalse Calandaima, que tendrá una capacidad de 4,5 millones de metros cúbicos y permitirá llevar agua a los acueductos de estas dos poblaciones y también a las de Apulo y Tocaima. Tendrá 30 metros de altura, inundará 34,6 hectáreas y garantizará a los usuarios 100 litros por segundo de agua potable durante todas las épocas del año.
Esta es una gran noticia para el departamento, más si se tiene en cuenta que hace 20 años no se construía un embalse de estas características. Y su relevancia se hace mayor porque este recurso hídrico llegará a su vez a 18 acueductos rurales de la Provincia del Tequendama de Cundinamarca, los más afectados por las sequías y por la contaminación del río Bogotá.
“Este proyecto, que ya tiene estudios de diseño y detalle, está a la espera de obtener la aprobación del estudio del impacto ambiental y tiene un costo estimado de 61.200 millones de pesos”, afirma Andrés Díaz, gerente de las Empresas Públicas de Cundinamarca (EPC). Los aportes provienen de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) (20.000 millones), de la Nación (24.000 millones), y del departamento (17.200 millones).
Esta obra, que está a punto de concretarse después de años de análisis –en 2006 comenzó a evaluarse la posibilidad de construirla– se convertirá en un cuerpo de agua clave para la región. Los especialistas explican que el Candalaima será un embalse con el tamaño justo que necesitan los habitantes del sector. “Lo más importante es que garantizará esos 100 litros por segundo que requieren las comunidades”, asegura Díaz.
Para responder cualquier inquietud de los ciudadanos de la zona con respecto a los desafíos medioambientales y sociales del proyecto, EPC creó un grupo de trabajo en campo que se encarga de informar a las juntas de acción comunal y a las alcaldías municipales sobre los beneficios del embalse. De hecho, cuando la CAR contrató, en 2011, un estudio para conocer la factibilidad técnica, económica y ambiental del proyecto, se concluyó que era viable en todos los aspectos, como lo confirman los estudios de ingeniería de detalle.
La zona del embalse no forma parte de reservas biológicas, santuarios de fauna y flora o de algún territorio protegido por las comunidades indígenas. En total, es necesario adquirir 15 predios en dos municipios con una noticia que tranquiliza a las comunidades: el Calandaima es un embalse cuyo único propósito es abastecer de agua potable a la región.