¡Los mercados campesinos llegan a Bogotá!

¿Alguna vez se ha preguntado cómo se abastece Bogotá? ¿De dónde viene la uchuva que está comiendo, la naranja del jugo que está tomando o la papa de su puré? La respuesta es Cundinamarca. De hecho, el 48 por ciento de los productos que llegan a la capital provienen de este departamento y de manos campesinas. Sin embargo, tanto esa uchuva, como la naranja o la papa suelen arribar a Bogotá en manos de un intermediario que no siempre les paga a los productores el precio justo.

Es decir, en esta cadena productiva podría estar de más la figura del intermediario. Así lo demuestra el proyecto que la Gobernación ha llamado Mercados Campesinos, y que consiste en traer a Bogotá a pequeños productores de los 116 municipios de Cundinamarca para que ellos mismos puedan vender sus productos directamente. Este programa, que por ahora beneficia a 750 campesinos, también favorece a los habitantes de la ciudad porque estos productos son más baratos y frescos.

La planeación del proyecto comenzó en enero de 2017. El departamento realizó los estudios y las convocatorias públicas para seleccionar a quienes participarían en esta iniciativa. A los elegidos les brindó una capacitación en temas como atención al cliente y manejo y presentación de alimentos. Con estos conocimientos los agricultores lograrán que sus ventas sean exitosas.

Justo en septiembre, el mes en que circula esta edición especial, comenzará el desembarco de los pequeños productores a la capital. Unos buses de la Gobernación de Cundinamarca los recogerán en la madrugada. A las ocho de la mañana estarán en Bogotá, algunos en la Plaza de Lourdes, otros en la de Bolívar o la de Kennedy, y los restantes irán al Parque El Virrey. Cada uno de los campesinos –con su delantal, gorro, guantes y tapabocas– se dirigirá a su stand, donde ofrecerá sus productos frescos y a buen precio a los habitantes de la ciudad (entre muchos de ellos, las uchuvas, las naranjas y las papas). A las tres de la tarde regresarán a sus pueblos con el dinero en efectivo.

Al día siguiente, los mismos buses recogerán a otros campesinos que también tendrán la oportunidad de vender en la capital, con un sistema rotativo. Esa es la dinámica de este proyecto en el que la Gobernación de Cundinamarca ha invertido 2.000 millones de pesos y con el que demuestra claramente su apoyo a los pequeños productores. Ellos los están esperando en los Mercados Campesinos.