EDUCACIÓN
Bogotá se prepara para mejorar su infraestructura educativa
La entrega del colegio 'La Felicidad' de Kennedy es el primer logro de un programa que construirá 30 instituciones educativas, transformará 32 ya existentes y mejorará otros 300 planteles.
Bogotá ha alcanzado una tasa de cobertura en educación cercana al ciento por ciento, gracias a un esfuerzo por aumentar la capacidad del sector para garantizar el derecho a la educación. Sin embargo, aún persisten los problemas de infraestructura para atender la demanda educativa en algunas zonas de la ciudad. La falta de espacios dignos y condiciones favorables para estudiar afecta el bienestar de los estudiantes.
Para resolver este problema el alcalde mayor, Enrique Peñalosa, en el marco de su plan de desarrollo Bogotá Mejor para Todos, estableció la construcción de 30 nuevos colegios, la transformación de 32 instituciones ya existentes y el mejoramiento de otros 300 planteles. Por medio de esta iniciativa se busca, además, que los diseños arquitectónicos articulen a los colegios con escenarios locales para la cultura y el deporte, integrados a los modelos pedagógicos de cada institución.
A la hora de escoger los terrenos para construir los nuevos colegios, se les dio prioridad a las zonas con alta demanda educativa y mayores déficits de aulas, y a las localidades donde se desarrollarán más proyectos de vivienda prioritaria y de interés social en los próximos años.
Un estudio permitió identificar que muchos niños y jóvenes de la Ciudadela La Felicidad, en Fontibón, estaban matriculados en instituciones oficiales de Kennedy, una localidad que ya tiene déficit debido a la alta demanda de cupos. Ese trabajo también determinó que otros alumnos asistían a establecimientos educativos privados en las afueras de la ciudad, lo que implicaba largos desplazamientos y un impacto negativo en la movilidad de la zona por el paso de las rutas escolares. Adicionalmente, la ciudadela y los barrios que la rodean se caracterizan por sus proyectos de vivienda de interés social, que tienden a incrementar la demanda de cupos escolares. Todo esto llevó a que la Alcaldía seleccionara el barrio para construir el primer colegio nuevo del proyecto.
Pensar en grande
El Distrito ejecutó la obra entre enero de 2016 y agosto de 2017 en un lote adquirido por la administración anterior, con una inversión total de 22.622.267.638 pesos. El diseño priorizó espacios seguros y dignos que propicien el desarrollo de competencias de los estudiantes en áreas como la lectura, el deporte y las ciencias, de forma que promuevan el aprendizaje más allá de las aulas: las zonas de extensión de cada salón, las terrazas, las aulas polivalentes, las cubiertas verdes y el ágora permiten que los niños potencien sus capacidades a través de experiencias didácticas diferentes. El colegio tiene un área de 9.024 metros cuadrados y cuenta con todas las cualidades espaciales y recreativas para la jornada única.
Foto: Cortesía Alcaldía de Bogotá
La construcción se realizó siguiendo parámetros para ahorrar energía y reutilizar aguas lluvias, y las plantas quedaron dotadas con cámaras de seguridad y un sistema de sonido y televisión de última tecnología. En términos generales, el colegio tiene 30 salones de clase, 20 baterías de baños, laboratorios de física y ciencias, dos aulas de informática, un taller de arte, danzas y música, una biblioteca con sala de lectura infantil, cuatro aulas polivalentes, un centro de recursos de idiomas, un auditorio, un parque infantil y 50 biciparqueaderos.
La Felicidad suplirá la alta demanda de cupos educativos en Kennedy y Fontibón. Foto: Cortesía Alcaldía de Bogotá
El colegio La Felicidad IED ofrece 1.050 cupos que van a beneficiar principalmente a las familias de la ciudadela y sus zonas aledañas en Fontibón. La Alcaldía espera que se convierta en un punto de encuentro y servicios para la comunidad, pues pone a su disposición espacios como el auditorio, las canchas deportivas y los espacios polivalentes. Por lo pronto, este será el único colegio distrital bilingüe del sector, y el primero con un Centro Móvil de Innovación Educativa en la localidad, un espacio para que los docentes, especialmente aquellos que residen en zonas apartadas de la ciudad, tengan la oportunidad de mantenerse actualizados.