Íconos culturales
Un caballo muy peruano
Conozca las cualidades y bondades del equino más querido del Perú. Uno que es oriundo de sus tierras y que por su andar armónico es considerado como el caballo más suave del mundo.
Un noble francés alguna vez dijo que la elegancia, cuando quiso tener cuerpo y vida, se transformó en gato. En el Perú probablemente dirían que este atributo le pertenece solo al caballo de paso de sus tierras, una raza de origen africano que llegó a América con los españoles de la época de la Colonia.
Este caballo de raza bereber le dejó al equino peruano su particular andar. Como explica Percy Krapp, conocedor e instructor del caballo peruano de paso: “La característica más distinguida es su ambladura, es decir, su andar armónico donde se coordina la mano derecha (así la llaman los especialistas) con el pie derecho”. Justamente esa cualidad ha hecho que este caballo sea reconocido como uno de los más suaves del mundo.
Cuenta Krapp que “uno podría tomar una taza de té con toda tranquilidad mientras el caballo anda”. Describe su gusto por estos animales como una pasión que comparte con los miembros de su club, quienes hacen cabalgatas y promueven este equino, así como la Asociación Nacional de Criadores y Propietarios de Caballo Peruano de Paso (ANCPCPP) entidad oficial para la preservación de esta especie reconocida a nivel nacional e internacional.
La ANCPCPP, entre otras cosas, organiza y avala los concursos en que los caballos peruanos de paso demuestran su destreza y belleza. Esta raza es considerada embajadora del Perú, por ello desde el 28 de noviembre de 1992 está protegida por el Decreto Ley número 25.919. Y cada tercer domingo de abril se celebra anualmente el ‘Día del Caballo Peruano de Paso’.
Además, “por sus características únicas e indudable origen”, el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo declaró en 2012 a este equino Producto Bandera del país. Estas distinciones han hecho que cientos de extranjeros conocedores se sientan atraídos por el caballo peruano de paso, como Ivonne Novey, presidenta de la Asociación Panameña de Caballos Peruanos de Paso.
“El caballo une a América Latina y al mundo entero”, afirma Novey. Ella se enamoró de este equino por su brío, fuerte pero a la vez dócil. También porque lo conoció a través de los valses peruanos. Este caballo aunque parezca ser un animal vinculado al lujo y al poder, en realidad es símbolo del criollismo y estampa de las tradiciones del país andino.