Facturación electrónica, el gran salto tecnológico de las empresas

Mientras los líderes mundiales batallan para enfrentar la crisis sanitaria actual y el desplome de la economía, las grandes, medianas y pequeñas empresas hacen lo propio por mantenerse a flote, innovando y reorganizando sus procesos. En Colombia, las medidas tomadas por los empresarios hicieron crecer las ventas por canales digitales o a través del e-commerce y sobre todo, evidenciaron la necesidad de adoptar la facturación electrónica en todos los sectores económicos.

Según cifras de la Dian, en Colombia “más de 290.000 contribuyentes han habilitado el sistema de facturación electrónica este año, lo que representa un 79 por ciento del total de compañías registradas”, es decir, que la implementación pasó de ser un proceso lento y paulatino a un requerimiento indispensable para enfrentar la nueva normalidad.

David Ortiz, gerente de la compañía líder en el desarrollo del software contable y administrativo en Colombia, Siigo, explica que “el gran salto tecnológico que supone la adopción de la facturación electrónica no debería generar estrés para aquellos empresarios que no han implementado este proceso. Los costos que implica la adopción de la facturación electrónica es un asunto de percepción, es relativo y depende de factores como el software que requieran, el tamaño de su operación e incluso la familiaridad que tengan con el proceso digital. Los empresarios, sin excepción, deberían acogerlo rápidamente al considerarse una inversión prioritaria”.

Precisamente Siigo ha venido acompañando a las empresas en la implementación de tecnología que facilite los procesos contables en sus negocios y ha puesto especial atención a las mipymes, porque representan el 90 por ciento del sector productivo del país, son claves para la reactivación y buscan abrirse espacio en el mercado colombiano. “Aquellos emprendedores son los que queremos acompañar para que no tengan que adoptar de manera acelerada alguna nueva tecnología contando con poco presupuesto y luchando por mantenerse vigentes entre la competencia, los impuestos y eventuales sanciones, factores que ponen en riesgo los nuevos negocios en Colombia” agrega Ortiz.

Estos procesos no solo agregan competitividad en el mercado, la implementación de la facturación electrónica es el paso inicial de una verdadera transformación digital. La experiencia de Siigo atendiendo más 200.000 clientes en sistemas contables, facturación electrónica y control de ventas e inventario en una sola plataforma les ha permitido a empresarios e independientes formalizarse e incluso igualar a grandes compañías que cuentan con elevados presupuestos para cumplir con todos los requisitos de manera anticipada.

Expansión durante la pandemia

Consciente de la necesidad de implementar la facturación electrónica en América Latina, Siigo emprendió una rápida expansión por diferentes países de la región. En junio anunció su llegada a Chile y en septiembre, a Ecuador, donde también acompaña empresas a formalizar sus operaciones contables, fortalecer la estructura empresarial y destacar el valor agregado que les ofrecen a sus clientes.

Para el próximo año, Siigo tiene planes de inversión por 8 millones de dólares en tecnología para seguir su expansión, lo que a su vez implica la selección de excelente talento humano y soporte de alta calidad para todos los clientes. Además, cuenta con el apoyo de compañías como Microsoft y PayU para asegurar que toda la información de sus clientes se encuentre segura en la nube y que todos los procesos transaccionales se lleven a cabo.

“La prioridad de Siigo ha sido y siempre será transformar la vida de los contadores y  de las pequeñas y medianas empresas a través de tecnología de clase mundial, teniendo en cuenta que cuando una empresa empieza a utilizar tecnología, la productividad se eleva 20 por ciento. Por esa razón, desde Siigo los acompañaremos siempre en la digitalización de sus procesos contables”, concluye Ortiz.