EDUCACIÓN
Premio a los mejores
El Politécnico Grancolombiano reconoce a sus mejores estudiantes permitiéndoles representar a la institución en otros países del mundo.
Ser un buen estudiante siempre será motivo de orgullo. Pero ser uno de los mejores alumnos en el Politécnico Grancolombiano (fundado en 1980), además de satisfacciones trae grandes beneficios como, por ejemplo, ser un embajador por la Excelencia alrededor del mundo. Este programa del ‘Poli’ ha transformado la vida de 239 jóvenes universitarios y los ha convertido en representantes de la institución frente a otras universidades y grupos empresariales de Brasil y Panamá.
Solo los mejores logran ese honor, que cuenta con el apoyo de varios de los departamentos del alma mater: la Oficina de Relaciones Internacionales, la Vicerrectoría Académica y la Vicerrectoría del Estudiante. Lo que la institución pretende, finalmente, es brindarles a los estudiantes experiencias únicas que puedan recordar toda su vida.
“Yo nunca había salido del país, pero con el Poli pude hacerlo. Como reconocimiento a mi buen récord académico viajé a Panamá cuatro inolvidables días. Aprendí de la cultura y de la historia del país, conocí el Canal de Panamá, la zona franca de Colón, la Universidad del Istmo y, claro, también fuimos a la playa”, explica Carlos Mayorga, un alumno de 20 años, que por su notable desempeño es embajador por la excelencia.
“Pero lo que más me gustó de esta experiencia fue el haber conocido a otros estudiantes, intercambiar conocimiento, aprender a relacionarme en un ambiente internacional y a descubrir las maravillas del mundo. Ser embajador supone enfrentar muchos retos personales y profesionales. Sin duda, los jóvenes tenemos miles de posibilidades para convertirnos en los profesionales que soñamos ser”, agrega este estudiante de Comunicación Social y Periodismo.
Fernando Dávila, rector del Politécnico Grancolombiano, dice que “nuestra institución cree en el estudiante, por eso siempre busca estrategias académicas que promuevan el aprendizaje autónomo y el uso de una segunda lengua en contextos internacionales. Hoy todo transcurre a través de las redes sociales, así que nuestro deber es enseñarles a nuestros alumnos de manera vivencial cómo poder interpretar esos cambios, esos nuevos contextos en los que se mueve el mundo y formar profesionales integrales”.
La travesía de los estudiantes del Politécnico Grancolombiano no termina al dejar sus aulas. Y los que han sido embajadores jamás olvidarán los lazos que generaron en otros países, las experiencias que vivieron y el conocimiento que adquirieron. Se trata, finalmente, de formar buenas personas, profesionales dedicados que puedan crear un mundo mejor y transformar vidas.