REPORTAJE
Los detalles de cómo llegó Wolverine a tomarse un tinto con los cafeteros del Huila
El actor australiano Hugh Jackman, estrella de los ‘X-Men’, estuvo el año pasado en tierras opitas, donde hizo un valioso aporte a los caficultores de la zona.
El 7 de octubre del año pasado, los titulares de los principales noticieros y periódicos de Colombia daban cuenta de la presencia del actor Hugh Jackman en la ciudad de Neiva. Se decía que la estrella de los X-Men revisaba unas locaciones para su próxima película; otros afirmaban que estaba de vacaciones en el país, y algunos periodistas de televisión hacían notas sobre la cama del hotel donde había dormido el musculoso australiano de Les Misérables.
Pocos sabían que el principal motivo de su viaje era visitar a los caficultores del Huila y la zona donde se cultiva uno de los cafés más preciados del mundo, para Jackman el “mejor café que he tomado en mi vida”. Así que el actor vino a conocer de primera mano el trabajo de cerca de 4.000 pequeños asociados a la Cooperativa Central de Caficultores del Huila (Coocentral), una entidad que desde 1975 trabaja en el fortalecimiento de los cafeteros huilenses.
Coocentral agremia a pequeños productores de siete municipios del centro del Huila: Garzón, Gigante, Guadalupe, El Agrado, Pital, Suaza y Tarqui. Allí brinda créditos, capacitaciones, asistencia técnica, comercialización de café e insumos, a pequeños agricultores, con el aliciente de que las ganancias, que rozan los 15.000 millones de pesos, retornan a los caficultores en inversión social. “Tenemos indicadores increíbles, mientras la productividad nacional está en 15 sacos por hectárea, nosotros estamos en el orden de 30 a 40 sacos”, asegura Luis Mauricio Rivera Vargas, gerente general de Coocentral.
Una de las claves del éxito del café origen Huila es que el 95 por ciento de la caficultura del departamento está conformada por pequeños productores, aquellos que tienen menos de cinco hectáreas cultivadas. A esto se suma que la zona, rodeada por dos cordilleras, posee unas condiciones geográficas ideales, por lo que, desde el punto de vista organoléptico, el grano que aquí crece tiene una amplia gama de sabores que van desde los cafés ácidos hasta los dulces, con variedades achocolatadas, avanilladas y frutales. Estas características despertaron el interés de la compañía estadounidense Keurig Green Mountain (una de las líderes del mercado del café en el mundo), que comercializa el grano huilense hace más de una década.
"Hace 12 años el departamento comenzó a ganar varios galardones internacionales y empezamos a recibir visitas de potenciales clientes. Pero era triste verlos llegar con muchos escoltas o que tan solo permanecieran pocas horas, porque no existía la infraestructura para recibirlos", dice el gerente de Coocentral. De la necesidad de vincular más clientes surgió la idea de construir un hotel temático sobre café llamado Kahvé (café en turco), de esta forma los interesados podían venir, interactuar con la cadena productiva y visitar las plantaciones, para convencerse de que estaban llevando un producto de inmensa calidad.
En 2017 el café huilense se hizo viral en todo el mundo gracias a Jackman, quien le había pedido a la Keurig Green Mountain que le seleccionara una muestra con los mejores cafés del mundo para lanzar una nueva mezcla para su fundación Laughing Man. Y la compañía no dudó en elegir el café de los pequeños productores huilenses para que entrara en el proyecto del famoso Wolverine, que busca invertir en el bienestar y el desarrollo de estas comunidades caficultoras.
Después de que Jackman lo calificara como uno de los mejores cafés del mundo, quizás el mejor, decidió hacer una donación similar a la que hizo en Etiopía (el país con el que inició su fundación) y que inmortalizó en el documental Dukale’s Dream (2014). El actor contactó a Coocentral y en muestra de agradecimiento por un gran café donó 242.000 dólares, una suma que se ha invertido en el mejoramiento de las viviendas de los agricultores y en el otorgamiento de 50 becas universitarias a jóvenes de la región.
Para mostrar su felicidad los productores invitaron al actor al municipio de Garzón para “enamorarlo de la región". Jackman visitó los cultivos, hizo algunas grabaciones, compartió con todos los eslabones de la cadena productiva y, por supuesto, tomó mucho café. Esto sin duda trajo un aporte invaluable a los cafeteros huilenses que además de aumentar su producción pueden decir, "yo me tomé un tinto con Wolverine".