Homenaje a cuatro personas que ayudaron al Puerto de Cartagena en estos 25 años

Mar de vida 1925-2013

Los recuerdos de Rodolfo de la Vega estaban sembrados al pie del mar Caribe. Llegó al mundo portuario en 1947 cuando comenzó a trabajar en la Terminal Marítima de Cartagena y nunca lo dejó. Ni siquiera después de jubilarse en 1988 del área de operaciones del puerto. Desde entonces, su rutina se volvió la escritura hasta que completó el libro Crónicas Portuarias, en el que reúne sus experiencias de vida alrededor de esa Cartagena que tanto quiso. Los relatos se convirtieron en material de consulta en ciudades como Barranquilla, Buenaventura y Turbo.

Gran timonel 1951-2015

Franca, valiente y justa. Ángela María Sánchez brilló en una industria liderada por hombres. Durante más de dos décadas cumplió una destacada labor ejecutiva en el Grupo Puerto de Cartagena. Mediaba las discusiones en la junta directiva y muchos la buscaban para obtener sus consejos. Ella fue una de las responsables del nacimiento de la Fundación Puerto de Cartagena y la Fundación Humana para Servir. Dos proyectos que lideró en silencio, pues creía firmemente que no era necesario andar contando las obras sociales, así con ellas se estuvieran transformando vidas.

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Visionario 1933-2017

De Fabio Echeverri se decía que era trabajador, frentero y cabeciduro. Este paisa nació en 1933 y fue el responsable de la apertura de muchas de las empresas que hoy día jalonan la economía colombiana. En 1974 se convirtió en presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), desde donde promovió políticas para la defensa y la renovación industrial. Durante el gobierno del expresidente Álvaro Uribe se dedicó a apoyar el desarrollo y la modernización de las zonas francas de las terminales marítimas del país.

Buen viento 1924-2018

En 1976 abrió sus puertas el Hotel Capilla del Mar. Un referente hasta hoy del turismo en Cartagena. A su inauguración asistieron los reyes de España invitados por el artífice de este proyecto, el abogado y economista Alberto Araújo. Como gerente de Empresas Públicas de Cartagena impulsó obras como la del Centro Internacional de Convenciones y el Hotel de las Américas. También participó en la cruzada para que los cruceros incluyeran a la ciudad en sus rutas. Hasta su muerte, el pasado mes de abril, trabajó en beneficio de la ciudad, especialmente de los niños en situación vulnerable.