ENERGÍA

Así pinta el "megafuturo" energético de Colombia

La UPME tiene una buena noticia: los proyectos de fuentes de energías renovables no convencionales han aumentado en el país. La no tan buena: ¡necesitamos más!

Ricardo Ramírez*
25 de abril de 2018
Central hidroeléctrica Alto Anchicayá, Valle del Cauca. | Foto: Archivo Particular

Colombia cuenta con una capacidad instalada en generación de energía eléctrica de 16.742 megavatios. De estos, 10.963 provienen de fuentes hidroeléctricas, 787 megavatios se generan en plantas menores, la energía eólica aporta al sistema 19 megavatios, y la cantidad restante es sumada por las térmicas a gas, carbón, combustibles líquidos y cogeneración.

Como han explicado varios artículos de este número, las Fuentes de Energías Renovables No Convencionales (conocidas en el lenguaje técnico como ERNC), han cobrado protagonismo en el mundo y en el país. Una de las medidas claves para su promoción en Colombia fue la Ley 1715 de 2014, que tiene como objetivo integrar este tipo de energías al mercado eléctrico y en las Zonas No Interconectadas (ZNI), además de aportar al desarrollo sostenible, a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y al abastecimiento energético. Esta ley establece incentivos tributarios con el fin de facilitar su incorporación a todo nivel. Lo cierto es que en los últimos años ha habido un incremento en la intención y la concreción de proyectos con ERNC, y una respuesta creciente en cuanto a la solicitud de incentivos tributarios.

De otra parte, las señales del plan de expansión de los recursos de generación y de las redes de transmisión de electricidad, que presenta cada año la Unidad de Planeación Minero Energética no han sido ajenas a esta tendencia. En el del año 2017 se prevé una expansión de largo plazo con una mayor participación de las renovables, si se tienen en cuenta los proyectos inscritos en el registro de la UPME.

La participación de la generación eólica y solar resulta notoria, sin dejar atrás otras tecnologías como la hidroeléctrica, que también cobra relevancia por su firmeza. Todas ellas serán primordiales para desarrollar la capacidad adicional de energía que requiere el país para 2028, que será de entre 5.700 y 6.000 megavatios.

A nivel de incentivos tributarios para proyectos con ERNC se han recibido 370 solicitudes de certificación –266 ya cuentan con el aval respectivo–, los cuales suman una capacidad de 1.662 megavatios, que equivale al 9,88 por ciento de la capacidad instalada del país. Cabe resaltar que los proyectos con mayor participación son los solares fotovoltaicos y con rango entre 0 y 1 megavatios (revise las tablas de solicitudes y de Intervalo de Capacidad por Tecnología).

El 71,4 por ciento de los proyectos han podido continuar con el trámite ante la autoridad ambiental competente. Sin embargo, no todos los que han obtenido el certificado de la UPME han finalizado aún sus trámites con la Anla y la Dian.

Es importante destacar que la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) expidió la resolución 030 de 2018 que regula las actividades de autogeneración a pequeña escala y generación distribuida en el sistema interconectado nacional, lo cual es un gran avance para este tipo de desarrollos en el país (hablamos más de este tema en la página 66).

*Director de la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME).