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La ‘ciudadanía alimentaria’ de Bogotá

Estos son los planes con los que la capital busca garantizarles a sus ciudadanos el acceso a una buena alimentación, reducir la malnutrición, fortalecer los sistemas de abastecimiento y promover el consumo de comida saludable.

26 de julio de 2020
El ecosistema de abastecimiento presenta grandes desafíos: exceso de intermediarios, poca tecnología, altos desperdicios y un desequilibrio en la distribución del ingreso, en donde el campesino es el que menos gana. | Foto: Andrés Quilaguy

La seguridad alimentaria es un tema prioritario y hace parte de los retos y desafíos de Bogotá. Es por esto que el nuevo Plan de Desarrollo Distrital 2020-2024, ‘Nuevo Contrato Social y Ambiental del Siglo XXI’, incorpora en sus proyectos el “incremento de la sostenibilidad del sistema de abastecimiento y distribución de alimentos de Bogotá”, que a su vez tiene como metas asociadas fortalecer 8.000 actores del Sistema de Abastecimiento Distrital de Alimentos, especialmente a los campesinos y sus organizaciones sociales, y organizar 1.600 mercados campesinos que permiten la comercialización sin intermediarios y a precios justos, beneficiando a campesinos y ciudadanos.

El objetivo para 2031 es haber revertido de forma progresiva los indicadores de inseguridad alimentaria establecidos en la Política Pública de Seguridad Alimentaria y Nutricional ‘Construyendo Ciudadanía Alimentaria 2019-2031’ (Ppsan) y su respectivo plan de acción integrado por tres grandes ejes. El primero aborda la inequidad económica y social; el segundo es el Sistema de abastecimiento y distribución de alimentos saludables y agua (Sada), que busca fortalecer la eficiencia logística del sistema, las compras públicas locales y el comercio justo, y adoptar un manejo adecuado del recurso hídrico y del suelo en los predios rurales, además de disminuir las pérdidas y los desperdicios de alimentos y de agua. Y, finalmente, están las prácticas saludables de alimentación y nutrición.

Lograrlo no será una tarea sencilla, por eso se adelanta un plan de acción. El concepto articulador de este es la llamada ‘ciudadanía alimentaria’, según la cual se redefine el papel de los actores sociales dentro del sistema alimentario, y de esta forma los habitantes de la ciudad se convierten en sujetos de deberes y no solo de derechos, con una corresponsabilidad desde sus acciones individuales, familiares y colectivas.

BUENOS PLANES

La capital cuenta con el Plan Maestro de Abastecimiento de Alimentos y Seguridad Alimentaria para Bogotá (Pmasab). Su objetivo es garantizar un efectivo aprovisionamiento y facilitar el acceso de la ciudadanía a alimentos saludables, de calidad y a precio justo. Sin embargo, el ecosistema de abastecimiento presenta grandes desafíos: exceso de intermediarios, poca tecnología, altos desperdicios, concentración de la oferta y un desequilibrio en la distribución del ingreso, en donde el campesino es el que menos gana.

Hoy se está construyendo el articulado de un nuevo plan que busca consolidar el Sada en condiciones de sostenibilidad social, económica y ambiental como un plan verde, para fortalecer los actores de la cadena alimentaria, disminuyendo la intermediación que no agrega valor, contribuyendo a la desconcentración de la oferta, generando mejores ingresos a través de la comercialización de productos de forma más equitativa, incluyendo a los pequeños y medianos productores en las compras públicas de alimentos, creando un sistema de información desde la producción hasta la comercialización, e identificando alertas y acciones tempranas en una perspectiva de integración regional y de trabajo intersectorial entre los territorios que abastecen la capital.

COMPRAS PÚBLICAS DE ALIMENTOS

Aumentar la participación de los pequeños y medianos productores de alimentos en las compras que realizan las entidades distritales será posible con la inclusión de organizaciones de productores de agricultura campesina, familiar y comunitaria, y de pequeños procesadores de alimentos, comerciantes de plazas de mercado e incluso de tiendas y supermercados.

Para cumplir este propósito, Bogotá consolidó la Mesa Distrital de Compras Públicas para la inclusión de un porcentaje de compras a los pequeños y medianos productores en los procesos contractuales como el Programa de Alimentación Escolar (PAE) de la Secretaría de Educación Distrital, los comedores comunitarios, los bonos y canastas de la Secretaría Distrital de Integración Social. 

PÉRDIDAS Y DESPERDICIOS DE ALIMENTOS

Disminuir las pérdidas y desperdicios de alimentos en la cadena de suministro es otro de los propósitos , en cumplimiento de la Ppsan y del acuerdo Distrital 753 /2019. El plan de trabajo para conseguirlo incluye la implementación de un programa distrital, convocatorias que identifiquen y apoyen soluciones innovadoras para una Bogotá sin desperdicios, más cerca del campo, donde se rescaten alimentos y estos se transformen.

MERCADOS CAMPESINOS

A través de los mercados campesinos se promueve la inclusión de pequeños productores y emprendedores de proyectos agro-productivos, impulsando la comercialización directa sin intermediarios y a precio justo.

Para fortalecer la asociatividad, la inclusión digital y la transformación productiva de los campesinos se implementan plataformas virtuales para generar un mercado alternativo en medio de la pandemia por covid-19. La implementación de estas herramientas tecnológicas permite a los productores la comercialización electrónica y la expansión de sus mercados, posicionando a la ciudad como una Bogotá Rural Digital a través de programas que modernizan y transforman la distribución de los productos del campo.

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