El trueque ha sido una de las estrategias de la Gobernación de Cundinamarca para reactivar la economía. Con Boyacá se intercambiaron 102 toneladas de abono orgánico por peras. | Foto: Cortesía Gobernación de Cundinamarca

AGRO

Los ‘Circuitos cortos de comercialización’, una alternativa de ventas campesinas

Este programa de la Gobernación de Cundinamarca permite que los productores del campo puedan llevar a las plazas de mercado los cultivos que, debido a la pandemia, no han podido ofrecerles a los compradores.

26 de julio de 2020

La pandemia no ha sido un impedimento para que el sector agropecuario siga funcionando. De hecho, esta crisis nos ha recordado el papel fundamental que desempeña para garantizar la seguridad alimentaria de los colombianos. Sin embargo, el aislamiento preventivo obligatorio sí ha impactado sus números, debido a que hay menos consumidores en las plazas de mercado, supermercados, tiendas y centrales de abasto, y a que los restaurantes ya no pueden aprovisionarse como lo hacían antes porque su actividad prácticamente se detuvo.

Esta nueva realidad motivó la creación de distintas iniciativas para los pequeños productores. Entre ellas sobresale la de los ‘Circuitos cortos de comercialización’, un programa de la Gobernación de Cundinamarca que les brinda apoyo a los campesinos y promueve la comercialización de los productos que, debido a la pandemia, no han podido vender en las plazas de mercado del departamento y de Bogotá. La iniciativa, además, permite que ofrezcan y comercialicen sus cultivos directamente, sin intermediarios. Todos los días se realizan labores de seguimiento en estos espacios para garantizar el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad.

Actualmente hay 25 asociaciones de productores, integradas por cerca de 800 campesinos, que comercializan sus cultivos en las plazas de mercado de Facatativá, Zipaquirá y Cáqueza, donde todos los días llegan productos frescos como el aguacate, la naranja y la panela. También se crearon circuitos de comercialización en las plazas de los barrios Restrepo y 20 de Julio, en Bogotá. Las ventas ya superan los 122 millones de pesos y se espera que finalmente las 130 asociaciones de productores que funcionan en Cundinamarca hagan parte de ella.

EJERCICIO PILOTO

La primera jornada se desarrolló en Facatativá y participaron las provincias de Gualivá y Sabana Occidente. A las tres de la mañana los vehículos de la Empresa de Licores de Cundinamarca recogieron a los campesinos de municipios como Villeta, Nocaima, Nimaima y La Vega. A las seis de la tarde todos los productos se habían vendido. Los alimentos más demandados fueron: plátano, panela, aguacate, café, chocolate, sábila, chucula, huevos y limón, entre otros. Hoy son diez las asociaciones que ofrecen sus cultivos en la plaza de Facatativá y todas han conseguido aliados comerciales. Para la elección de los productos que se van a vender en estos espacios se desarrolla un trabajo conjunto entre la Gobernación de Cundinamarca, los alcaldes y los directores de las Unidades Municipales de Asistencia Técnica Agropecuaria de los 116 municipios del departamento. A través de avisos y notificaciones, la Gobernación identifica los municipios que reportan sobreoferta de productos y los incluye en la iniciativa. Adicionalmente, se han hecho mejoras en la infraestructura de las plazas de mercado y de los centros de acopio.

LOS BENEFICIOS DEL TRUEQUE

Esta es otra de las estrategias para reactivar la economía en medio de la crisis sanitaria, garantizar el abastecimiento de alimentos y evitar los desperdicios. Los intercambios se realizan entre los municipios de Cundinamarca y, en algunos casos, con otros departamentos como Boyacá. Con este último se canjearon 102 toneladas de abono orgánico por peras, que fueron entregadas a las familias más vulnerables de las provincias de Almeida y Ubaté. Los trueques han generado 125.000 millones de pesos y beneficiado a 33 municipios de Cundinamarca. En los camiones de la Empresa de Licores se transportaron 246 toneladas de alimento sin ningún costo.

¿CÓMO PARTICIPAR?

1. Los productores que deseen hacer parte de la iniciativa deben comunicarse con los directores de las Unidades Municipales de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata) o de las secretarías de desarrollo económico de cada uno de los municipios.

2. La Secretaría de Agricultura del departamento asignó un ‘padrino’ a cada provincia para que brinde información sobre la situación agropecuaria de los municipios que la componen.

3. El ‘padrino’ comparte información cada ocho días a la Secretaría de Agricultura, encargada de hacer el trabajo de priorización para las diferentes plazas de mercado, dependiendo de la oferta y la demanda.

4. Después de la labor de priorización, los productores son contactados directamente para conocer sobre los productos que poseen, las cantidades, qué día se pueden recoger para llevarlos a la plaza de mercado, entre otros.

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