La odisea de transportar medicamentos a los lugares más apartados de Colombia

Transportar medicamentos es también cargar con la responsabilidad de la vida de los pacientes. Los productos farmacéuticos requieren condiciones controladas de temperatura, humedad y seguridad que, de no cumplirse durante el desplazamiento, pueden tener un impacto negativo en su calidad y, por lo tanto, en la salud de sus destinatarios.

En 1998 Land Fast se convirtió en la primera empresa colombiana en especializarse en esta labor vital, dedicándose exclusivamente al transporte de productos farmacéuticos y equipamiento médico: desde aspirinas e insulina, hasta catéteres y stents para operaciones del corazón. Actualmente, la empresa entrega más de 435.000 piezas mensuales a hospitales, farmacias y pacientes en todos los rincones del país. Para ello cuenta con una flota propia de 114 vehículos adecuados con reguladores de temperatura y humedad, contenedores de aislamiento térmico y congeladores que garantizan las condiciones de estos productos.

“Esta tecnología se complementa con un capital humano altamente capacitado que incluye transportistas, auxiliares, regentes de farmacia y químicos farmacéuticos. Todos ellos conocen las implicaciones que tiene el no llevar los productos de forma adecuada y entienden que lo que hacemos es transportar vida”, asegura Iván Ahmed López, director general de Land Fast.

Los servicios que presta la compañía son indispensables para los más de 5.000 pacientes a quienes Land Fast entrega medicamentos en casa. La mayoría, explica López, viven en zonas donde las condiciones de infraestructura o de orden público dificultan el acceso. “A algunos pueblos en el río Magdalena solo se puede llegar en lancha. En el Chocó, a veces tenemos que completar la última etapa del recorrido en mula. Son poblaciones que no tienen hospital ni farmacias, dependen de nuestra eficacia. Nosotros llegamos hasta donde sea necesario”, concluye.