CORONAVIRUS
Coronavirus: así funciona el enjuague bucal turco que detecta la covid-19
Según los científicos, este nuevo método permitirá, entre otras cosas, una menor exposición de los trabajadores de la salud, pues tendrán menor contacto con los pacientes y podrán reducir el riesgo de contagio.
Han transcurrido diez meses desde que se supo de la existencia de la covid-19. Desde entonces, científicos de todo el mundo no han descansado tratando de encontrar la vacuna más eficaz y diseñando nuevos métodos para su diagnóstico.
Han surgido varias opciones: los test PCR, test serológicos y test rápidos hacen parte de la lista con la que el personal médico en todo el mundo ha diagnosticado más de 40 millones de contagios. La mitad de los casos se sitúan en tres países: Estados Unidos (8.154.935), India (7.550.273) y Brasil (5.235.344).
Ahora, científicos en Turquía acaban de desarrollar una nueva técnica con la que pretenden obtener saliva con un enjuague bucal para las pruebas de covid-19, lo que podría ser una nueva opción ante las molestias que causa la extracción de muestras a través de la nariz o la garganta.
“Esta técnica nos permite usar las gárgaras en lugar de tomar muestras por la nariz para diagnosticar la covid-19. Así la sensibilidad del test aumenta unas veinte veces”, declaró a la agencia Efe el doctor Tanil Kocagöz, director del programa en la Universidad de Acibadem en Estambul.
Según la información que se conoce, el método consiste en diluir una pastilla de un concentrado molecular en un tubo de agua, con el que el paciente realizará un enjuague bucal para recoger la muestra del test.
“Los microorganismos se van a concentrar alrededor de las partículas de polímero (concentrado molecular). Sacamos la muestra con una jeringa y la introducimos en un test de COVID-19”, señaló Kocagöz.
Los científicos afirman que mediante gárgaras se recoge una mayor muestra de fluidos del paciente que mediante el raspado nasal de otros test de coronavirus, por lo que aumenta la efectividad de diagnóstico en los test de antígenos, también conocidos como test rápidos.
Otra de las bondades, que según los científicos, tiene este método, es que permite una menor exposición de los trabajadores de la salud, pues tendrán menor contacto y podrán reducir el riesgo de contagio en ellos.
“El método puede facilitar el trabajo de diagnóstico en aeropuertos, servicios de urgencia o domicilios”, señaló la universidad en un comunicado.
Actualmente, países, como Austria, Alemania o Israel, también desarrollaron pruebas mediante gárgaras y enjuague bucal. Aún no se tiene fecha exacta para que empiece a implementarse el nuevo método en Turquía.
El nuevo coronavirus ya superó los 40 millones de contagios en todo el mundo. En Europa, donde ya hay más de 250.000 muertos y la segunda ola de infecciones no cede, entraron a funcionar nuevas restricciones, como un toque de queda nocturno en Bélgica o la obligación de usar mascarillas en lugares cerrados en Suiza.
Así mismo, ya hay más de 1,1 millones de muertos a nivel mundial. Solo la semana pasada, en Europa murieron más de 8.000 personas por covid-19.
Justamente Unicef anunció recientemente que desea almacenar mil millones de jeringas para vacunas antes del final de 2021 y poder así lanzar rápidamente campañas masivas de inmunización.