VACUNAS

¡Ojo! Esta es la variante del coronavirus más poderosa que la vacuna Sputnik V

Los expertos explicaron cuál era la variante que bajaba la efectividad de la vacuna rusa.

2 de julio de 2021
Venezuela ha lanzado una campaña de vacunación con las vacunas rusa Sputnik V y la del laboratorio chino Sinopharm, aunque ha recibido menos de 1 millón de dosis.
Más del 95 % de los virus SARS-CoV-2 que circulan en el Área Metropolitana de Buenos Aires corresponden a las variantes Gamma y Alpha. | Foto: AP

Un estudio reciente realizado por científicos del Proyecto PAIS (Proyecto Argentino Interinstitucional de Genómica de SARS-CoV-2), del Biobanco de Enfermedades Infecciosas BBEI, del Instituto Inbris y del Hospital de Clínicas José de San Martín, citado en el medio Clarín, comparó “la capacidad neutralizante de sueros obtenidos de individuos infectados por SARS-CoV-2 durante el año 2020 y de individuos vacunados con Sputnik V, frente a las variantes de SARS-CoV-2 circulantes actualmente en Argentina: linajes P.1 (gamma, Manaos), B.1.1.7 (alfa, Reino Unido) y C.37 (lambda, Andina)”.

Para hacer dicho estudio, los investigadores tomaron como referencia “la actividad neutralizante ejercida por los sueros frente al linaje B.1 (cepa de referencia del año 2020)”.

El virólogo e integrante de Proyecto País Humberto Debat explicó que “lo que se observó es que tanto con una dosis como con dos los sueros de las personas inmunizadas con Sputnik V mantenían el nivel de anticuerpos neutralizantes contra alfa y lambda, igual que contra la cepa de referencia de 2020; lo mismo sucedió con los sueros de convalecientes, lo cual quiere decir que los anticuerpos contra esta variante bajan hasta tres veces”.

Ministro de Salud responde sobre posible adquisición de vacunas rusas por parte de Colombia
Ministro de Salud responde sobre posible adquisición de vacunas rusas por parte de Colombia | Foto: AP

Sobre el caso de la variante gamma, el experto señaló que “los anticuerpos neutralizantes disminuyen tres veces en relación a la respuesta frente a la cepa de referencia que se utilizó de 2020, lo cual si bien es significativo, no es dramático”.

Igualmente, recordó que “estos ensayos in vitro solo reflejan la respuesta humoral (anticuerpos), pero no la celular (mediada por los linfocitos que son los que brindan la memoria), por lo que no expresan la respuesta total del sistema inmune y una disminución en los anticuerpos no necesariamente implica una disminución en la protección”.

Los datos obtenidos por este trabajo se centraron en evaluar la disminución de la capacidad de neutralización de los sueros de convalecientes y vacunados con Sputnik V frente a la variante gamma, los cuales coinciden con otros estudios que se realizaron anteriormente en el exterior con las vacunas de Oxford/AztraZeneca y Pfizer, según afirmó la investigación.

Uno de los puntos más importantes resaltados por el estudio es que la variante Lambda –incorporada por la OMS como variante de interés– es “eficientemente neutralizada por los anticuerpos generados en respuesta tanto a la infección por variantes circulantes en nuestro país en el año 2020, como también por aquellos generados en respuesta a la vacunación con Sputnik V”.

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Un trabajador médico le inyecta a una mujer una dosis de la vacuna rusa Sputnik V contra la covid-19 . | Foto: Agencia AP

El estudio también indicó que desde marzo de este año “un cambio en la dinámica de circulación de variantes virales del SARS-CoV-2 en Argentina ha planteado una nueva alarma en el terreno de la salud pública”.

Actualmente, más del 95 % de los virus SARS-CoV-2 que circulan en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) corresponden a las variantes gamma y alfa, y a la variante analizada lambda, las cuales en este momento tienen preocupados a los médicos y al Gobierno en general.

Cabe mencionar que la OMS definió como variante de preocupación a “aquellas en las que se ha demostrado, tras una evaluación comparativa, que están asociadas a un aumento de la transmisibilidad, aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad; o disminución de la eficacia de las medidas sociales y de salud pública o de los medios de diagnóstico, las vacunas y los tratamientos disponibles”.

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