Coronavirus
Trastornos psiquiátricos, entre los efectos secundarios que pueden padecer los sobrevivientes de la covid-19
Este resultado sugiere que una de las consecuencias de la pandemia podría ser una ola de problemas mentales y neurológicos, según los encargados del análisis.
A más de un 30 % de las personas que han superado el coronavirus y que formaron parte de un estudio con cerca de 230.000 participantes se les diagnosticó un trastorno cerebral o psiquiátrico seis meses después del contagio.
Este resultado sugiere que una de las consecuencias de la pandemia podría ser una ola de problemas mentales y neurológicos, según los encargados del análisis.
Los expertos concluyeron que no se sabe la relación que hay entre el virus y las afecciones psiquiátricas como la ansiedad y la depresión, los cuales estuvieron entre los 14 diagnósticos más comunes que se encontraron entre los pacientes.
Casos de personas con accidentes cerebrovasculares, demencia y otros trastornos neurológicos fueron mucho menos comunes, según los investigadores. Sin embargo, no fue una cifra baja, particularmente en aquellos que padecieron el virus de la covid-19 de forma grave.
“Nuestros resultados indican que las enfermedades cerebrales y los trastornos psiquiátricos son más comunes después de la covid-19 que después de la gripe u otras infecciones respiratorias”, aseguró Max Taquet, psiquiatra de la Universidad de Oxford en Gran Bretaña que codirigió el trabajo.
Y a pesar de que en el estudio no se pudo encontrar la relación entre el virus y estas afecciones, Taquet advirtió que será necesaria urgentemente una investigación para saber cuál es “con miras a prevenirlos o tratarlos”.
Esto es un tema que ya generaba preocupación entre los expertos, pues un estudio hecho hace unos meses por los mismos investigadores halló que el 20 % de los sobrevivientes de la covid-19 padecieron posteriormente de un trastorno psiquiátrico dentro de los tres meses siguientes al contagio.
Estos nuevos hallazgos, publicados en la revista Lancet Psychiatry, tuvieron en cuenta los registros de salud de 236.379 pacientes contagiados del virus, en su mayoría de Estados Unidos, y se evidenció que el 34 % había sido diagnosticado con enfermedades neurológicas o psiquiátricas dentro de los seis meses.
La ansiedad, en un 17 %, y los trastornos que afectan al estado de ánimo de las personas, en un 14 %, fueron los más comunes y no mostraron relación alguna con lo leve o grave que había sido la infección del virus de cada uno.
No obstante, del total de quienes estuvieron en cuidados intensivos por el virus, el 7 % tuvo un accidente cerebrovascular dentro de los seis meses siguientes y casi el 2 % fue diagnosticado con demencia.
“Aunque los riesgos individuales de la mayoría de los trastornos son pequeños, el efecto en toda la población puede ser sustancial”, explicó Paul Harrison, profesor de psiquiatría de Oxford, que también hizo parte del trabajo.
Otro efecto secundario encontrado recientemente
En los últimos días, algunas de las personas que han recibido la vacuna contra el virus de la covid-19 han afirmado tener un nuevo efecto secundario que no se había reportado anteriormente.
Estas personas dijeron tener un sabor a metal en la boca, luego de recibir las dos dosis de los biológicos.
Los expertos han afirmado que todas las vacunas pueden tener efectos secundarios, siendo el más común sentir dolor donde le fue aplicado el producto o padecer algunos dolores musculares.
Un informe reciente de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) halló que los síntomas similares a los de la gripe, el cansancio y el dolor de cabeza eran los efectos secundarios más comunes experimentados por los británicos, junto con el dolor en el brazo y la fiebre.
Ahora, este nuevo síntoma se ha detectado en los Estados Unidos, donde una gran cantidad de personas ha dicho tener un intenso sabor metálico en la boca que dura varios días después de la vacunación.
Después de recibir la vacuna Pfizer, John Howard, de Carolina del Sur, dijo en diálogo con NBC News que la sensación llegó a los pocos minutos de haber recibido la vacuna, y aunque dijo que no era “debilitante”, solo quería que su café tuviera un sabor normal. Otro paciente, Dave Bischel, de 52 años, de California, dijo que podía saborear el níquel.