Así es el proyecto Litoral, un legado artesanal que ilumina Cali, transforma vidas y preserva un legado del Pacífico

En el atardecer cálido de un diciembre en Cali, las manos de Doña Faustina Ramos — una artesana desplazada del Pacífico — moldea unos delicados portavasos tejidos con hilo en cobre. Su taller, un espacio humilde pero lleno de historias, es su refugio y su legado. Allí, las enseñanzas de su abuela aún resuenan en cada hilo que entrelaza, en cada diseño que evoca las olas del Litoral que la vio nacer. Para Doña Faustina su oficio no es solo un medio de sustento; es un acto de resistencia cultural y un puente hacia el futuro.

Ella, el pasado 26 de diciembre, junto a otros 19 maestros artesanos vivieron un momento inolvidable en el marco de la 67ª Feria de Cali, cuando, junto a 100 aprendices, recibieron su certificación como parte del Proyecto Litoral, una iniciativa de la Alcaldía de Santiago de Cali que busca preservar y proyectar la riqueza artesanal del Pacífico y suroccidente colombiano.

Este evento marcó el cierre de un año de trabajo dedicado a dignificar los oficios tradicionales y asegurar que su legado trascienda generaciones.

El Proyecto Litoral, liderado por la Secretaría de Cultura, ha sido una luz de esperanza para comunidades como la de Doña Faustina. A través de un enfoque integral, esta iniciativa identificó y convocó a 20 maestros artesanos para compartir sus conocimientos con 100 aprendices, garantizando así la continuidad de técnicas ancestrales como la tejeduría, cestería, alfarería, joyería y tallado en madera. Además, el proyecto incluyó incentivos económicos, bonos de apoyo a los aprendices y la recuperación de talleres, ofreciendo las herramientas necesarias para que estos artistas transformen su arte en un medio de vida sostenible.

De Cali para el mundo

Con Litoral, la ciudad rinde homenaje a las raíces del Pacífico y proyecta su riqueza artesanal hacia el mundo, reafirmando a Cali como un epicentro de innovación social, sostenibilidad y salvaguarda del patrimonio inmaterial. De ahí la importancia del lanzamiento de una vitrina artesanal en Cali, como parte de esta iniciativa, la cual ha permitido que estas creaciones únicas no solo encuentren su lugar en la ciudad, sino también que lleguen a mercados nacionales e internacionales.

Por primera vez, muchos de estos artesanos han sido reconocidos formalmente, lo que les abre puertas hacia nuevas oportunidades y asegura que el arte del Pacífico y del suroccidente alcance audiencias globales.

“Este proyecto no solo rescata los saberes ancestrales de nuestra región, sino que asegura que estas tradiciones vivan en las generaciones futuras. Hoy celebramos un triunfo colectivo, un reconocimiento a la resiliencia y al talento de quienes llevan el alma del Pacífico en sus manos”, expresó el alcalde Alejandro Eder durante la ceremonia.

Por su parte, Leydi Higidio, secretaria de Cultura, también resaltó el impacto del proyecto: “Litoral convocó al sector cultural caleño y del Pacífico, así como a los cabildos indígenas, como punto de partida de este proceso de aprendizaje y legado. Este proyecto no solo conserva el patrimonio, sino que da a nuestros artesanos el orgullo y las herramientas para construir su futuro. Este es un legado que no es solo nuestro, sino del mundo entero”.

De cara al 2025, el Proyecto Litoral planea transformar los talleres de los artesanos, dotándolos de recursos y condiciones óptimas para potenciar sus creaciones y garantizar la sostenibilidad de su labor. Con esta visión, Cali se consolida como un epicentro de innovación social, sostenibilidad y preservación del patrimonio inmaterial.

Mientras tanto, en su taller, Doña Faustina seguirá sonriendo al ver a su aprendiz aplicar las técnicas que le enseñó. “Esto es lo que soñé”, dice. Y con razón: el arte del Pacífico sigue vivo, navegando en las manos de quienes lo aman, hacia un futuro brillante.