ASPECTO MEDICO DE LA CRIMINALIDAD
La Academia Nacional debate las posibles causas de la delincuencia en el país.
Academia Nacional de Medicina- Ediciones Tercer Mundo, Bogotá, 1982, 258 páginas.
El tema de la criminalidad, en un país que acusa indices elevados, está conectado con la cuestión de la propiedad, de la educación, de la represión sexual, de la codicia y las condiciones infrahumanas en que tienen que vivir miles de personas.
La Academia Nacional de Medicina organizó en 1982 las primeras jornadas médico-jurídicas sobre la criminalidad en Colombia, con el objetivo de ahondar en las causas y el desenvolvimiento de este fenómeno que cubre todo el país.
Los datos más relevantes consignan una tendencia a acentuarse la comisión de delitos entre los años de 1960 a 1977, en un 300%. De estos delitos, los cometidos contra la propiedad constituyen más del 50%, indicando una correlación entre la delincuencia y las condiciones socio-económicas en que vive gran parte de la población colombiana. Los delincuentes son, en su mayor parte, jóvenes entre los 17 y los 30 años; el desgaste de energía y la necesidad de contar con todos los reflejos aleja a las personas mayores de 30 años de la delincuencia, así como de otras actividades. Los sectores sociales más afectados por la delincuencia, es decir, en donde se halla el mayor número de infractores de la ley, son los agricultores, los obreros, los jornaleros y los choferes. La gran mayoría de éstos son solteros. En cuanto al grado de instrucción, se revela un dato curioso, ya que, mientras los delincuentes analfabetas sostienen índices descendentes, de 16.8 % en 1959 a 5.2% en 1977, los de educación primaria son un porcentaje alto pero estable (82.3% en el 59 y 84.8 en el 77); los índices de delincuentes con educación secundaria y superior son bajos, pero se incrementan del 1.5% en 1959 a 10.5% en 1977. Teniendo en cuenta que la población carcelaria es de cerca de 50.000 reclusos, con una población de 25 millones de habitantes, se puede comparar con Brasil, que tiene más de 4 veces la población colombiana y sólo cuenta con 40.000 reclusos .
Alrededor de la criminalidad se puede discutir ampliamente, y esta primera publicación de la Academia Nacional de Medicina sobre el tema debe inducir propuestas claras sobre si la solución se encuentra en el aumento del pie de fuerza policíva, o en otro tipo de medidas. No faltan quienes sostienen la apetencia natural del colombiano por la criminalidad y la transgresión de las leyes, copiando las fórmulas de Lombroso y Ferri sobre el criminal nato. Otros sostienen la preminencia de las condiciones sociales sobre la conducta del individuo, y las posibilidades de reeducar al delincuente; estos son los trasuntos del conductismo y los ambientalistas de Europa y Estados Unidos.
Tales discusiones trascienden el marco de la estadística social y las teorías sicológicas, con los estudios de Konrad Lorenz sobre la agresión humana, proyección, según él, de la agresividad animal. Erich Fromm, en un memorable libro sobre la destructividad humana, hace un balance de todas estas teorías y produce una nueva visión del problema, más ubicado con el humanismo que defendió toda su vida.
En todo caso, el fenómeno de la criminalidad colombiana dará mucho qué tratar en los próximos años, y la Asociación Nacional de Medicina ya ha dicho cuáles son las bases de la discusión.