Máscaras de la comunidad indígena Kogui
Las dos máscaras fueron adquiridas en 1915 por Konrad Theodor Preuss, etnólogo y conservador del Museo Real de Etnología, institución predecesora del Museo Etnológico. | Foto: Foto: Cortesía embajada de Colombia en Alemania

CULTURA

Colombia pide a Alemania devolver valiosas máscaras precolombinas

Las dos máscaras fueron adquiridas en 1915 por Konrad Theodor Preuss, etnólogo y conservador del entonces Museo Real de Etnología.

16 de septiembre de 2022

Colombia solicitó a Alemania la devolución de dos máscaras de los indígenas kogui, adquiridas a principios del siglo XX, anunciaron este viernes el Museo Etnológico de Berlín y la Embajada de Colombia en Alemania en un comunicado conjunto.

“Después de haber estado en contacto con los representantes de la organización indígena Gonavindúa Tayrona y el ICANH (Instituto Colombiano de Antropología e Historia) durante varios años, Colombia finalmente ha solicitado la restitución de las dos máscaras”, indicó Hermann Parzinger, presidente del consejo de la Fundación Patrimonio Cultural Prusiano (SPK), que engloba a los museos públicos de Berlín.

Espero que pronto hayamos aclarado las cuestiones pendientes para encontrar una solución adecuada para Colombia y los kogui”, añadió Parzingerk, quien indicó que la decisión final debe ser tomada por el Consejo de la Fundación SPK.

“El retorno de las máscaras a Colombia es para nosotros un asunto de importancia fundamental”, dijo por su parte la embajadora de Colombia en Alemania, Yadir Salazar Mejía, quien aseguró confiar en que las máscaras pronto estarán en Colombia en su lugar de origen, con los kogui.

Las dos máscaras fueron adquiridas en 1915 por Konrad Theodor Preuss, etnólogo y conservador del Museo Real de Etnología, institución predecesora del Museo Etnológico.

Preuss recogió más de 700 objetos en un viaje de investigación a Colombia entre 1913 y 1919, de los que se conservan unos 440 en el Museo Etnológico.

Uno de los intereses centrales de Preuss fue la investigación de la “Cultura Monolítica” prehistórica de San Agustín, en el sur de Colombia. Publicó un catálogo en dos volúmenes de las esculturas que allí se conservan, algunas de las cuales excavó o solamente localizó.

En las conversaciones bilaterales, además de las máscaras, se abordó un memorando de entendimiento sobre la conservación de objetos arqueológicos y el estudio científico de las colecciones colombianas en Alemania, así como trabajos de investigación conjunta sobre las técnicas de orfebrería de las culturas indígenas precolombinas.

El pueblo indígena kággabba o kogui, es uno de los cuatro pueblos indígenas asentados en la Sierra Nevada de Santa Marta. Están concentrados principalmente en la región vertiente norte sobre el mar Caribe, la cual presenta mayor precipitación pluvial en los afluentes de los ríos Don Diego, Palomino y Ancho.

Indigenas Arhuacos en el Cerro de Monserrate
Líderes indígenas pertenecientes a los pueblos: arhuaco, kogui, wiwa y kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta. Foto: Guillermo Torres | Foto: Guillermo Torres

Según información de Ministerio de Cultura, esta comunidad posee una identidad cultural arraigada y orientada hacia las sanciones espirituales y sociales.

“La lengua nativa se denomina kogui y pertenece a la familia lingüística chibcha. Este pueblo tiene una arraigada identidad cultural y su Ley de Origen rige su cotidianidad, su existencia, sus problemáticas comunitarias y así mismo, orienta sanciones espirituales y sociales”, explica.

Además, explica que esta cultura ha logrado sobreponerse a las dificultades que el paso del tiempo y la evolución de la sociedad pone en términos de identidad. Desde el impacto que generó época de la conquista hasta el actual auge tecnológico no han afectado la autonomía de esta comunidad indígena.

“En la época de la conquista, el encuentro cultural con conquistadores y colonizadores provenientes de España, produjo cambios culturales que se evidencian en la actualidad. Sin embargo, este y los demás pueblos indígenas de la Sierra Nevada lograron un grado de autonomía, que a pesar de cierto sometimiento religioso y laboral, les permitió una mayor pervivencia de las tradiciones”, señala.

*Con información de la AFP.