¿Cómo pedirle a Dios un milagro ‘imposible’?

A lo largo de las Sagradas Escrituras se puede encontrar versículos que exaltan la grandeza, el poder y la majestuosidad de Dios, como por ejemplo, en el evangelio de Lucas 1: 37: “Porque para Dios no hay nada imposible”; o en el libro del profeta Jeremías 32: 17 “¡Ah, Señor mi Dios! Tú, con tu gran fuerza y tu brazo poderoso, has hecho los cielos y la tierra. Para ti no hay nada imposible”.

De ahí que el creyente eleve su oración para pedirle por un milagro que en palabras de la Real Academia Española (RAE): “Es un hecho no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino”.

Resulta que dentro de la creencia se asegura que el Señor es digno de alabar porque ha hecho grandes proezas en medio de su pueblo.

“Grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Y su grandeza es inescrutable. Generación a generación celebrará tus obras, y anunciará tus poderosos hechos. En la hermosura de la gloria de tu magnificencia, y en tus hechos maravillosos meditaré. Del poder de tus hechos estupendos hablarán los hombres, y yo publicaré tu grandeza. Proclamarán la memoria de tu inmensa bondad, y cantarán tu justicia”, fragmento del Salmo 145.

De hecho, dentro de los portentosos milagros que hizo Dios, según cuenta la Biblia, no solo fue abrir el mar para que el pueblo de Israel pasara asediado por los egipcios, como lo señala Éxodo 14:2-22:

“Y extendió Moisés su mano sobre el mar e hizo Jehová que el mar se retirara por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas. Entonces los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda”.

Sino que también a través de Jesucristo hizo milagros de sanidad y salvación, como lo relata el evangelio de Mateo 15: 29-31:

“Salió Jesús de allí y llegó a orillas del mar de Galilea. Luego subió a la montaña y se sentó. Se le acercaron grandes multitudes que llevaban cojos, ciegos, lisiados, mudos y muchos enfermos más, y los pusieron a sus pies; y él los sanó. La gente se asombraba al ver a los mudos hablar, a los lisiados recobrar la salud, a los cojos andar y a los ciegos ver. Y alababan al Dios de Israel”.

En este sentido, el texto bíblico comenta que para poder pedir a Dios un milagro ‘imposible’ hay que tener fe y acercarse a Él, como lo señala el libro de Hebreos 11: 6:

“En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan”.

Esta es la oración para pedir por un milagro ‘imposible’

El sitio web Biblia Work sugiere hacer esta oración para pedir por un milagro que se cree es imposible:

“Padre, hoy vengo a ti con una fe tan pequeña que no puedo ver el camino. Quiero creer que eres capaz de hacer más de lo que jamás imaginé. Quiero caminar por fe y no por vista. Dios, por favor, trae un milagro a mi vida. Sé que puedes hacer lo imposible en mi vida y estoy confiando en tus promesas. Gracias por ser un Dios que ve y escucha todas mis necesidades. En el nombre de Jesús, amén”.