DOCTOR DOLITTLE

Versión contemporánea del musical de los años 60, interpretado por el comediante de moda en Hollywood.

3 de agosto de 1998

En 1967 el director Richard Fleischer llevó a la pantalla un musical que narraba entre acarameladas canciones la vida y milagros de una especie de San Francisco de Asís moderno, un médico que tenía la capacidad de comunicarse con los animales. Tanto para la crítica como para el público en general la película resultó ser un absoluto fracaso, aunque tiempo más tarde tuvo alguna repercusión en la pantalla chica.
Ahora Betty Thomas ha retomado el tema para elaborar una comedia digna de su protagonista: Eddie Murphy. Todas las payasadas que lo han hecho famoso a lo largo de su trayectoria y que los espectadores tuvieron la oportunidad de apreciar el último año en El profesor chiflado, han sido rescatadas por Murphy en Doctor Dolittle. Muecas ostentosas y gritos desgarradores, acompañados de uno que otro apunte de ocasión, hacen parte de una trama cuyo atractivo principal estriba en la motricidad digital y la locuacidad de los animales protagonistas.
A través de la historia de un médico que se niega a aceptar el don natural de dialogar con los animales, la cinta traza toda una parábola, con moraleja incluida, de la aceptación de la diferencia y la honestidad de las personas consigo mismas a la hora de definir el curso de su vida sin importar lo que la gente opine.
Aunque la cinta resulta igual de tonta que su antecesora, cierta gracia de Murphy en su interpretación, sumada a la comicidad del guión en algunos de sus pasajes, ofrecen al espectador fácil diversión siempre y cuando se llegue a la sala de cine con el corazón dispuesto.