Cultura
El Salmo que se debe leer cuando se quiere dejar todo atrás y volver a empezar
Este texto de la Biblia puede ser de gran ayuda para esos momentos en los que se quiere volver a empezar.
Muchos describen la vida como situaciones de caídas, pero también para levantarse, aprender y seguir adelante. Hay momentos en los que las decisiones, el pasado y los fantasmas que viven en él pueden complicar el camino, pero se debe ser fuerte para poder superarlos.
Lo más importante del asunto es saber que el pasado no se puede cambiar, pero el presente si, y este se transforma cuando se toma la decisión de hacerlo y así poder tener un nuevo futuro.
En todo este proceso no se debe olvidar que Dios siempre está junto al camino y Él es el encargado de guiar por el lugar correcto según su voluntad.
Para estos momentos se puede acudir a los textos bíblicos, pues en estos aparecen numerosos relatos en los que se pueden encontrar y hablar con el Señor. Uno de estos son los Salmos que son himnos de alabanza al señor.
El portal Aleteia explica que los Salmos son: “unas composiciones que, principalmente y en la gran mayoría de casos, tienen como finalidad alabar a la divinidad; aunque también tienen otras finalidades (súplicas y lamentos). Los salmos nos recuerdan la necesidad de alabanza y adoración, simplemente por la alegría de estar en la presencia de Dios que crea y sostiene el universo”.
Salmo 33
“Alegraos, oh justos, en Jehová;
En los íntegros es hermosa la alabanza.
2 Aclamad a Jehová con arpa;
3 Cantadle cántico nuevo;
Hacedlo bien, tañendo con júbilo.
4 Porque recta es la palabra de Jehová,
Y toda su obra es hecha con fidelidad.
5 Él ama justicia y juicio;
De la misericordia de Jehová está llena la tierra.
6 Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos,
Y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca.
7 Él junta como montón las aguas del mar;
Él pone en depósitos los abismos.
8 Tema a Jehová toda la tierra;
Teman delante de él todos los habitantes del mundo.
9 Porque él dijo, y fue hecho;
Él mandó, y existió.
10 Jehová hace nulo el consejo de las naciones,
Y frustra las maquinaciones de los pueblos.
11 El consejo de Jehová permanecerá para siempre;
Los pensamientos de su corazón por todas las generaciones.
12 Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová,
El pueblo que él escogió como heredad para sí.
13 Desde los cielos miró Jehová;
Vio a todos los hijos de los hombres;
14 Desde el lugar de su morada miró
Sobre todos los moradores de la tierra.
15 Él formó el corazón de todos ellos;
Atento está a todas sus obras.
16 El rey no se salva por la multitud del ejército,
Ni escapa el valiente por la mucha fuerza.
17 Vano para salvarse es el caballo;
La grandeza de su fuerza a nadie podrá librar.
18 He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen,
19 Para librar sus almas de la muerte,
Y para darles vida en tiempo de hambre.
20 Nuestra alma espera a Jehová;
Nuestra ayuda y nuestro escudo es él.
21 Por tanto, en él se alegrará nuestro corazón,
Porque en su santo nombre hemos confiado.
22 Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros,
Según esperamos en ti”.