Cultura
¿En qué casos y cómo se utiliza correctamente el haz y el has?
Este es uno de los errores más comunes al escribir.
La ortografía es un vasto mundo de conexiones y completitudes, pero también es el camino para jugar con la infinidad de variedades que ofrece el lenguaje. Se puede explotar al máximo la creatividad y transformar una prosa en una auténtica obra de arte. Cuando se sabe combinar con la sintaxis y fondo, un texto puede pasar para la posteridad.
Nunca se es lo suficientemente perfecto al usar la ortografía a su favor. En cambio, la práctica es lo que hace que las palabras hilen de la mano con la idea plasmada en el papel. Es por ello que tener en mente las reglas gramaticales es fundamental a la hora de retar al lenguaje.
Durante el polisémico ejercicio de escribir puede haber olvidos o dudas al momento de ubicar una palabra u oración en un texto. Por suerte, la Real Academia de la Lengua Española siempre está del lado de quien escribe, para responder cualquier inquietud en relación con el lenguaje.
En ese orden de ideas, una de las inquietudes más frecuentes al momento de escribir es el uso de ‘has’ y ‘haz’. La Real Academia de la Lengua Española (RAE) tiene la solución para no cometer un error.
Tendencias
Aunque, dependiendo de la zona geográfica, ‘has’ y ‘haz’ se puedan pronunciar igual, son clases de palabras diferentes con significados distintos. Las tres palabras tienen diferentes y variados significados, dependiendo del contexto en el que use.
Por un lado, ‘has’ es la segunda persona del presente del verbo haber del tú o vos. Esta forma verbal no aparece sola, sino que va acompañada con un participio, lo cual en conjunto construye el pretérito perfecto compuesto (conocido también como antepresente). Algunos ejemplos de esta regla son:
- ¿De verdad has estudiado medicina?
- ¿No te has dado cuenta de lo bien que cocinas?
- Creo que has roto el móvil.
- Has enviado el email equivocado.
Otro uso de este concepto es en las perífrasis ‘has de’ + infinitivo para indicar una acción correspondiente a obligación o necesidad. Es el mismo significado de ‘tienes que’ + infinitivo. Para plasmarlo con más claridad, unos ejemplos son:
- Has de ir al doctor antes de que empeores.
- No has de hacer nada hasta que te indique.
- Has de estudiar toda la noche.
- Has de llamarlos y decirles que lo sientes.
Por otro lado, ‘haz’ tiene otros usos diferentes. En primer lugar, se puede emplear tanto como verbo como nombre. Para el caso del verbo, este concepto es la forma segunda persona singular del tú o vos, concretamente del imperativo del verbo hacer. Algunos ejemplos son:
- Haz los deberes, por favor.
- Haz lo que te digo y no protestes.
- Hazme un favor: no grites tanto que no estoy sordo.
- Hazte tú la cena, que yo no tengo tiempo.
- Hazlo si quieres, pero hazlo bien.
Cuando se quiere usar como nombre, cuenta con diferentes definiciones. Las más habituales son la propagación de los rayos luminosos o partículas desde un mismo origen y un manojo atado de cosas. En ese orden de ideas, la forma correcta de este tipo es:
- Entraba un haz de luz por la ventana.
- Se acercó con un haz de leña en la mano para encender un fuego.
- Hicieron experimentos con madera y un haz de partículas alfa.
- Ese haz de cañas es muy grande.
Cabe mencionar que hay otra palabra con la que puede haber confusión, la cual es ‘as’. La diferencia es que esta forma es usada en menor medida que los casos anteriores, dado que solo cuenta con un significado.
‘As’ es un nombre masculino cuyo plural es ases. Hace referencia a la carta de la baraja francesa equivalente al número uno y a la persona que es sobresaliente en un área. Los ejemplos que acompañan este concepto son:
- Se sacó el as de la manga y le llamaron tramposo.
- Es un as de la aviación: hace cosas que pocos pueden.
- Su director es un as de los negocios.
- Solo tengo un as: el de picas.