‘Encrucijadas’, el nuevo libro de Jonathan Franzen

Si se pudiera definir el nuevo libro de Jonathan Franzen y la historia que cuenta detrás, es una novela que relata cómo nuestras creencias nos influyen mucho más de lo que creemos en nuestra vida y como nos termina afectando el día a día. La sinopsis data de un pastor protestante padre de cuatro hijos que quiere terminar la relación con su esposa, pero esperando que sea ella la que culmine el vínculo que los une hace años. Mientras tanto, el libro recorre las vidas cotidianas de cada uno de sus hijos y como afrontan la difícil situación familiar.

‘Encrucijada’ será el primer libro de lo que se espera que sea una trilogía lanzada por Franzen titulada ‘La clave para todas las mitologías’. Estos seguirán hablando sobre la religión, un tema más importante que lo que piensan en Europa Occidental y los progresistas en EEUU. A pesar de que para el autor es distinto hablar de religión ahora que la gente no va a la iglesia y la gran impopularidad de la religión en muchos sectores sociales.

Según Franzen, no tuvo que investigar mucho sobre el tema, sino más bien hacer memoria sobre experiencias personal de niño, donde sus padres discutían mucho y hablaban con él sobre el otro. Además de que sus progenitores lo llevaban a la iglesia cada domingo e incluso hizo parte de un grupo de misioneros que viajó a México

Se sitúa la novela en 1951-52, época especial en que los matrimonios eran arreglados y tenían que ser para toda la vida. Pero, que llegan los años 70 donde llegan los divorcios y el feminismo. En “Encrucijada”, el marido es el que recibe toda la atención pero la que tenía las capacidades era la mujer, entonces la novela se centra en ese matrimonio de esa época.

En los personajes que se relata al personaje principal, el pastor Russ Hildebrandt, su esposa Marion y sus cuatro hijos: Clem, el mayor, volvió a su casa desde la universidad y vive influenciado por el moralismo extremo. Becky, que es muy popular en su escuela, pero que verá como cambiará eso con el tiempo Perry, una vendedora de drogas que ha decidido cambiar su vida, y Jay, el pequeño, que transita con todo el ambiente familiar.

Para la construcción de estos personas dentro del libro, Franzen dice que siempre quiere sus personajes no sean el arquetipo clásico de buenos y malos, sino que son más complejos y quiere que los lectores empaticen con ellos en medida de que a pesar de ser ficticios, no son perfectos y tienen cosas buenas, pero también están llenos de errores humanos.

Franzen pide a los lectores que lean libro a libro cuando vaya saliendo cada uno de los de la trilogía y no esperar a que sean publicados todos. Aún así, dice que los otros volúmenes tendrán un tiempo de espera menor a lo acostumbrado con sus novelas, algo que le ha resultado extraño, ya que nunca había hecho libros con tan poco tiempo entre sí.

Jonathan Franzen es destacado por ser un defensor del medio ambiente y que si bien no es religioso, dice que hay una falsa creencia al respecto de que la creencia debe ir ligada a un culto ligado a esta. El escritor llegó a la inmortalidad después del éxito de su novela Las Correcciones (2001) que lo llevó a ganar el National Book Award y que gracias a Libertad (2010), lo llevó a ser portada de la revista Time, siendo el primer escritor en una década en lograrlo. Franzen también estuvo en Colombia como invitado en el Hay Festival de Cartagena del 2012.