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Entreletras en imprenta. Jaime Fernández Molano y Julio Daniel Chaparro, pendientes de la edición de la revista, en el taller de editorial Cervantes en Villavicencio. Foto: Constantino Castelblanco.
Entreletras en imprenta. Jaime Fernández Molano y Julio Daniel Chaparro, pendientes de la edición de la revista, en el taller de editorial Cervantes en Villavicencio. Foto: Constantino Castelblanco. | Foto: Entreletras en imprenta. Jaime Fernández Molano y Julio Daniel Chaparro, pendientes de la edición de la revista, en el taller de editorial Cervantes en Villavicencio. Foto: Constantino Castelblanco.

Cultura y Libros

Entreletras lleva 40 años apostándole a la cultura en el Meta

En cuatro décadas, la Corporación Cultural Entreletras ha publicado alrededor de 300 libros y revistas, y ha realizado más de 3.000 proyectos y eventos culturales. Esta es la historia de una de las organizaciones culturales más antiguas del país.

Andrés Molano Téllez
3 de mayo de 2021

El proyecto nació en Villavicencio en 1981 bajo el liderazgo del escritor Jaime Fernández Molano, primero como un grupo cultural integrado por jóvenes escritores, pintores y fotógrafos sin banderas sectarias y alejados del proselitismo que reinaba para la época.

Así como Gabriel García Márquez lideraba el grupo de Barranquilla, Fernández se reunió con importantes personalidades de la cultura de la Orinoquia, con quienes debatía sobre libros, letras y arte. En las tertulias del ocaso se encontraban, por citar algunos nombres, Manuel Acosta, Silvia Aponte (q. e. p. d.), Vicente Casadiego, Carlos Augusto Gil, Julio Daniel Chaparro (q. e. p. d.), Francisco Piratoba (q. e. p. d.), Melco Fernández (q. e. p. d.) y Wilson Ladino Orjuela.

“El grupo de ‘entreletros’, como cariñosamente se les llegó a decir, removió los cimientos literarios y artísticos de una zona del país que había permanecido largas décadas inane y casi ausente del desarrollo cultural del país. Muchas puertas se abrieron, muchas ventanas se cerraron. Pero ellos siguieron creciendo mientras aprendían a abrir puertas y ventanas”, dice el escritor Isaías Peña Gutiérrez.

Entreletros en la XV Feria Internacional del Libro de Bogotá (mayo de 2002). De izquierda a derecha: Nayib Camacho, Darío Ortega Hernández, Francisco Piratoba, Isaías Peña Gutiérrez, Jaime Fernández Molano, Angélica María Guerrero, Jhon Fitzgerald Torres Sanmiguel (acurrucado), José Vicente Casadiego León, Nubia Suárez, Nancy Moreno y Sara Cortés Sandino. Foto: Constantino Castelblanco.
Entreletros en la XV Feria Internacional del Libro de Bogotá (mayo de 2002). De izquierda a derecha: Nayib Camacho, Darío Ortega Hernández, Francisco Piratoba, Isaías Peña Gutiérrez, Jaime Fernández Molano, Angélica María Guerrero, John Fitzgerald Torres Sanmiguel (acurrucado), José Vicente Casadiego León, Nubia Suárez, Nancy Moreno y Sara Cortés Sandino. Foto: Constantino Castelblanco. | Foto: Entreletros en la XV Feria Internacional del Libro de Bogotá (mayo de 2002). De izquierda a derecha: Nayib Camacho, Darío Ortega Hernández, Francisco Piratoba, Isaías Peña Gutiérrez, Jaime Fernández Molano, Angélica María Guerrero, Jhon Fitzgerald Torres Sanmiguel (acurrucado), José Vicente Casadiego León, Nubia Suárez, Nancy Moreno y Sara Cortés Sandino. Foto: Constantino Castelblanco.

De revista a editorial: sus primeras publicaciones

Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez
Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez | Foto: Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez

A la par del grupo de entreletros se crearon el Taller de Escritores y la revista Entreletras, con un primer título en su tapa: Taller Literario Entreletras. Los primeros tres números fueron páginas mecanografiadas y de ahí en adelante, impresas, con textos de escritores regionales y nacionales. A través de la revista se gestionaron concursos de poesía y cuento, los primeros en 1982 fueron ganados por Luis Díaz Granados y Juan Carlos Moyano, respectivamente.

En 1984, Entreletras se convirtió en fondo editorial. Sus primeras publicaciones fueron Mateo Solo, ópera prima del gran escritor Evelio José Rosero, que para entonces nadie quería editar, y el libro de poemas …Y éramos como soles, de Julio Daniel Chaparro, quien acaba de cumplir 30 años de ser asesinado en Segovia, Antioquia. La editorial publicó, además, el último libro de Alfredo Molano, titulado El destino de la luz.

El escritor Nayib Camacho, actual director del Taller de Escritores Entreletras, que forma parte de la corporación, destaca que fue la “primera editorial de la región que se aventuró a pensar la posibilidad de editar algo diferente al costumbrismo habitual. La voz inicial de quienes conformaban el grupo, quiso ir más allá de los recitadores y copleros”, con un interesante catálogo compuesto por textos de poesía, novelas, ensayos, antologías, diccionarios, cuentos y periodismo.

Desde Entreletras también se han realizado programas radiales, como Ateneo, Fin de semana y Viernes cultural, y se editaron dos sonovisos artísticos: El Llano, visión poética de nuestra tierra, con textos y voz de Julio Daniel Chaparro, fotografía de Constantino Castelblanco, música de Isaac Tacha y otros compositores llaneros, y luego, Campos Anaya, un sueño atormentado...’.

La Corporación –que además es cofundadora de la Red Nacional de Talleres de Escritura Creativa-Relata– ha realizado encuentros, congresos, festivales y concursos que se han institucionalizado, como Gotas de Tinta y Trazos de Vida, que han superado la cifra récord de los cien mil participantes en toda su historia.

Adicionalmente, desde 1988 participa en la Feria Internacional del Libro de Bogotá en calidad de coordinadora de la representación regional Meta y Orinoquia.

Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez
Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez | Foto: Imagen de las portadas de publicaciones de Entreletras. Cortesía de Andrés Molano Téllez

Del papel a lo digital

Entreletras, como fondo editorial, fue ganadora de la Beca para la Producción de Bienes y Servicios Creativos y Culturales Innovadores II, otorgada por el Ministerio de Cultura a través del Programa Nacional de Estímulos.

Gracias a ello, después de 40 años, acaba de dar un salto hacia el mundo virtual con la publicación de 25 libros digitales, en una nueva plataforma en la que los usuarios pueden adquirir desde 21.000 pesos cualquiera de ellos.

Entre los libros digitales se destacan el Diccionario llanero, de Hugo Mantilla, una recopilación lingüística y de formas de expresión de los habitantes del llano colombo-venezolano, y Casos y cachos llaneros, de John Moreno Riaño, que recopila historias y cuentos de los Llanos Orientales. También hay narrativa, poesía y cuento de autores como Jaime Fernández Molano, Nayib Camacho, Juan David Botero, Henry Benjumea Yepes, Apolinar Beltrán, Yormary Rincón, Roberto Sanabria García, José Vicente Casadiego, José Gregorio Villamil y Ómar Marino Rodríguez.

Además de la publicación de los libros digitales, Entreletras realizó y grabó ocho programas audiovisuales que pueden ser vistos en su canal de YouTube. Allí, sus fundadores hacen un recuento de la historia del grupo. También se encuentran entrevistas con varios autores que han aportado a la literatura regional en las últimas cuatro décadas.

Julio Daniel Chaparro y Jaime Fernández Molano con un ejemplar de la revista Entreletras. Vereda Barcelona, Villavicencio, año 1986. Foto: Constantino Castelblanco
Julio Daniel Chaparro y Jaime Fernández Molano con un ejemplar de la revista Entreletras. Vereda Barcelona, Villavicencio, año 1986. Foto: Constantino Castelblanco | Foto: Julio Daniel Chaparro y Jaime Fernández Molano con un ejemplar de la revista Entreletras. Vereda Barcelona, Villavicencio, año 1986. Foto: Constantino Castelblanco