“La innovación no sale de un repollo”

El premio Gabo nominó a El surtidor en la categoría de innovación por su técnica narrativa y por meterle el diente, a través de cuatro piezas, a la deforestación más acelerada del planeta, en El chaco, un lugar lleno de mitos e historia. El jurado dijo: combina la potencia visual con la rigurosidad de los datos, explorando la importancia y belleza de ese ecosistema, la historia de una comunidad indígena que protege un cerro, la de un pueblo comprado por una secta y cómo el negocio del carbón exportado a Europa se beneficia de la deforestación.

SEMANA habló con su director, Alejandro Valdez.

SEMANA: ¿El éxito de El surtidor depende del rigor o de la creatividad?

Alejandro Valdez: Influimos en la agenda mediática y logramos conectar con nuestra audiencia. Y lo hacemos cuando combinamos exitosamente el rigor periodístico con la creatividad, en la forma de contar la historia, donde la historia viene primero, y la forma, después. 

SEMANA: ¿Y cómo conquistar esa audiencia?

A.V.: Somos un medio de nicho y conocemos muy bien al público al cual nos dirigimos, un público muy cercano, que participa, que interactúa, que visita nuestras oficinas, que está con nosotros en las exposiciones, en los lanzamientos, que nos da feed back todos los días; una comunidad de comunidades. No somos un medio de masas, sino un medio de personas con nombre y apellido, lo que nos permite tomar decisiones de fondo y de forma mucho más cercanas a la realidad de nuestra audiencia. Así influimos en sus vidas, en sus decisiones, en cumplir sus objetivos. Y esto es algo que los medios nativos digitales deberían aprovechar.

SEMANA: ¿Cuánto tardó planeando y desarrollando un trabajo ambiental como Los desterrados del Chaco, finalista del Premio Gabo?

A.V.: Nos llevó seis meses, un tiempo para reportear, diseñar, redactar, ilustrar y programar. Los artículos de la serie Los desterrados del Chaco (puede ver el trabajo pinchando acá) son presentados con scrollytelling, una narrativa que utiliza el scroll para transmitir información, diseñada para el móvil. Un experimento que veníamos trabajando desde un año: el resultado es un proceso de acumulación de experimentos, de trabajos con la audiencia, con la comunidad, de errores muy grandes que cometimos. Por lo tanto, diría que es un proceso total de alrededor de un año.

SEMANA: ¿Qué papel juegan las redes sociales en su proceso?

A.V.: El surtidor nació en las redes y por las redes, porque entendemos que el público está allí: el periodismo tiene que ir a la gente y no necesariamente la gente al periodismo. Y el objetivo de El surtidor, en el día a día, es sacar a la gente de las redes, que salga de esos muros, de esas burbujas y puedan ir a nuestra web, que pueda sumarse a talleres, a participar de eventos y manifestaciones. Insisto: las redes no son plazas públicas, son espacios privados, regulados por las empresas más poderosas del mundo y que, digamos, nos convierten en burbujas, en cámaras de eco.

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SEMANA: ¿Pero viven o no de las redes?

A.V.: Si bien El surtidor vive en las redes sociales y las redes sociales son muy importantes para El surtidor, también somos conscientes de esa contradicción y siempre estamos alentando a las personas a salir de las redes. Internet es muchísimo más grande y fuera de las redes sociales está lo mejor de internet.

SEMANA: ¿Es un periodismo costoso de hacer?

A.V.: Yo creo que no es más costoso que hacer un video animado, o un video cualquiera. Sin embargo, sí hay mucha inversión de tiempo que a veces es difícil contabilizar, como, por ejemplo, cuántas megas está dispuesto a invertir la audiencia en una buena historia, en un país como Paraguay que tiene límites de datos de internet. Así descubrimos que mucha gente no le daba play a nuestros videos porque significaba terminar su saldo.

SEMANA: ¿Qué es para usted la innovación?

A.V.: La innovación no es un acto, no es algo que sale de un repollo, es una actitud ante la realidad. Y nosotros luchamos para que la innovación sea nuestro camino, porque somos un medio súper chico. Solamente si hacemos algo de mayor calidad, de mayor impacto, podemos romper el cerco mediático y entrar en el debate diario y servir a nuestra audiencia. Nuestros trabajos demandan tiempo y recursos pero mucho más caro sería hacer lo mismo de hace doscientos años.

SEMANA: ¿Qué logró Los desterrados del Chaco en Paraguay?

A.V.: Ayudó a que el actual debate presidencial en el país tenga muy presente la situación del Chaco y que ambos candidatos, Efraín Alegre y Mario Abdo Benítez, hayan hecho propuestas muy concretas para cambiar esa situación. Por lo tanto, la innovación es una inversión que trae sus beneficios.

SEMANA: ¿Cómo ve al periodismo hoy?

A.V.: está en crisis el modelo de negocios de los medios masivos de comunicación: Google, Facebook, Apple y Amazon concentran como nunca el gran porcentaje de la torta publicitaria. Pero el periodismo no está en crisis: la oferta que hay ahora, la calidad y la diversidad es infinitamente superior y lo demuestran los trabajos seleccionados en el Premio Gabo. La mayoría de ellos son medios nativos digitales, que han sabido encontrar un modelo de sostenibilidad que vaya más allá de la publicidad, que muchas veces está basado en una comunidad muy concreta, en modelos de colaboración, en modelos de periodismo abierto. Es decir, el buen periodismo, el de siempre, el que desafía al poder, el que sirve a las personas, nunca estuvo en crisis y nunca tuvo tantas posibilidades como ahora. La tecnología brinda posibilidades de contar buenísimas historias, pero, sobre todo, lo más importante, brinda la posibilidad de escuchar historias como nunca.