Cultura
Este es el salmo que se debe leer diariamente para proteger el hogar
Esta oración es uno de los instrumentos de alabanza entre los creyentes más poderosos.
Los salmos son poesías líricas religiosas que desde tiempos inmemoriales miles de feligreses leen como instrumento de alabanza entre los creyentes. De esta manera, los salmos han constituido, a lo largo de la historia de la humanidad, la materialización del agradecimiento y la fe de los millones de creyentes que acuden a este tipo de composiciones sagradas para recitar la benevolencia y divinidad de la deidad de los cristianos.
Una de las situaciones en la que más acuden los cristianos a la lectura de estos salmos es para la protección del hogar. Como tal, el salmo 91 es catalogado como una plegaria divina para mostrar que quien hace de Dios su hogar siempre contará con la protección del ‘Todopoderoso’.
Del mismo modo, este salmo de protección también se predican en los momentos difíciles, dado que es considerado una composición mesiánica de confianza y lamento en tiempos de peligro para hacer frente a las fuerzas malignas que amenazan con llevarse la paz y la tranquilidad de los creyentes.
A continuación, el portal web Churchofjesuschrist da a conocer este poderoso salmo:
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Salmo 91
Salmo mesiánico — Dios librará al Mesías del terror, de la pestilencia y de la guerra — Dios a Sus ángeles mandará por el Mesías y lo librará y honrará.
1. El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.
3. Porque él te librará de la trampa del cazador, de la peste destructora.
4. Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas hallarás refugio; a escudo y badarga es su verdad.
5. No temerás el terror nocturno, ni la saeta que vuele de día,
6. ni la pestilencia que ande en la oscuridad, ni la plaga que en pleno día destruya.
7. Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; más a ti no llegará.
8. Ciertamente con tus ojos mirarás y verás la recompensa de los malvados.
9. Porque has puesto a Jehová, que es mi refugio, al Altísimo, como tu morada,
10. no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.
11. Pues mandará a sus ángeles por ti, para que te guarden en todos tus caminos.
12. En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.
13. Sobre el león y la víbora pisarás; hollarás al cachorro del león y a la serpiente.
15. Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le honraré.
16. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.