Cultura
Evangelio de hoy, martes 2 de julio de 2024: " ¿Por qué tenéis miedo hombres de poca fe? "
El Evangelio nos invita a reflexionar en la fe y en el testimonio que las personas dan de ella
Desde El Vaticano, se comparten las Escrituras del segundo día de julio, para que los feligreses mediten sobre su fe y la presencia de Dios en sus vidas.
Lecturas del martes 2 de julio de 2024
Lectura de la profecía de Amós. Am 3, 1-8; 4, 11-12
Escuchen estas palabras que el Señor les dirige a ustedes, hijos de Israel, y a todo el pueblo que hizo salir de Egipto:
Tendencias
“Sólo a ustedes los elegí entre todos los pueblos de la tierra, por eso los castigaré con mayor rigor por todos sus crímenes.
¿Acaso podrán caminar dos juntos, si no están de acuerdo?¿Acaso no ruge el león en la selva, cuando tiene ya su presa?¿Lanza su rugido el cachorro de león desde su cueva, si no ha cazado nada?¿Cae el pájaro al suelo, sin que se le haya tendido una trampa?¿Se levanta del suelo la trampa, sin que haya atrapado algo?¿Se toca la trompeta en la ciudad, sin que se alarme la gente?¿Hay alguna desgracia en la ciudad, sin que el Señor la mande?
Ciertamente el Señor no hace nada sin revelar antes su designio a sus profetas. Pues bien, ya ha rugido el león, ¿quién no tendrá miedo? El Señor Dios ha hablado, ¿quién no profetizará?
Los he destruido a ustedes como a Sodoma y a Gomorra; han quedado como un tizón sacado del incendio y no se han vuelto a mí, dice el Señor.
Por eso te voy a tratar así, Israel, y porque así te voy a tratar, prepárate, Israel, a comparecer ante tu Dios”.
Evangelio del martes 2 de julio de 2024
Lectura del santo evangelio según san Mateo. Mt 8, 23-27
En aquel tiempo, Jesús subió a una barca junto con sus discípulos. De pronto se levantó en el mar una tempestad tan fuerte, que las olas cubrían la barca; pero él estaba dormido. Los discípulos lo despertaron, diciéndole: “Señor, ¡sálvanos, que perecemos!”
Él les respondió: “¿Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?” Entonces se levantó, dio una orden terminante a los vientos y al mar, y sobrevino una gran calma. Y aquellos hombres, maravillados, decían: “¿Quién es éste, a quien hasta los vientos y el mar obedecen?”.
Palabras de Santo Padre
“Incluso antes de que nosotros empecemos a buscarlo, Él está presente junto a nosotros. Y levantándonos de nuestras caídas, nos hace crecer en la fe. Quizá nosotros, en la oscuridad, gritamos: “¡Señor! ¡Señor!”, pensando que está lejos. Y Él dice: ‘¡Estoy aquí!’ ¡Ah, estaba conmigo! Así es el Señor”.
“La barca a merced de la tormenta es la imagen de la Iglesia, que en todas las épocas encuentra vientos contrarios, a veces pruebas muy duras: pensemos en ciertas persecuciones largas y amargas del siglo pasado, y también hoy, en algunas partes. En esas situaciones, puede tener la tentación de pensar que Dios la ha abandonado. Pero en realidad es precisamente en esos momentos que resplandece más el testimonio de la fe, el testimonio del amor, el testimonio de la esperanza”.
“Es la presencia de Cristo resucitado en su Iglesia que dona la gracia del testimonio hasta el martirio, del que brotan nuevos cristianos y frutos de reconciliación y de paz por el mundo entero”.