JESUS, UN FEMINISTA

Ida Magli, profesora de antropología cultural de la Universidad de Roma, es en Italia una figura de excepción. Su preparación la convierte en una científica más allá de toda sospecha, pero sus posiciones la llevan con frecuencia a enfrentamientos con distintas jerarquías: algunos catedráticos, la estructura eclesiástica y ahora las dirigentes tradicionales del feminismo. Todos estos sectores se han visto sacudidos por la aparición del último libro de la Magli "Jesús de Nazareth, mito y tabú" . En él la Magli recupera la imagen de un Jesús, al que no llama nunca Cristo, anticonformista, que libra batallas contra las instituciones. A este libro y a las polémicas que ha desatado la Magli se refiere diciendo: "yo estudio, reflexiono, opino, fundamento mis opiniones y digo exactamente lo que pienso. Lo demás para mí carece de importancia. Si hago algo útil se verá, si disgusta es problema de los otros no mío". Frente al interrogante del posible disgusto que pueda causar la lectura de su "Jesús de Nazareth" la autora afirma: "Quien tiene verdadera fe no puede sentirse incómodo por este libro que quizá moleste a alguna jerarquía eclesiástica. No hay nada sorprendente en replantear y redimensionar los problemas antiguos con nuevos interrogantes, con instrumentos de análisis nuevos y con una más decantada experiencia histórica".
Según la antropóloga, Jesús es, desde el punto de vista de la antropología cultural, un hombre que intentó una aventura que parecía imposible: cambiar, transformar totalmente la cultura a la que pertenecía.
Las teorías de la Magli han sido condensadas en varios volúmenes. "Matriarcado y poder de las mujeres" (1978) cuestiona las teorías expuestas por autorizadas voces masculinas como Lewis Morgan y Jacob Bachofen, a su entender equivocadas y discutibles; su "Introducción a la antropología cultural" es texto en varias universidades del mundo y "La mujer del hombre" causó un gran revuelo en el mundo del feminismo "clásico" italiano. En efecto, la Magli no describe una mujer siempre víctima y condenada por la sociedad. Su trabajo es más bien analizar la sociedad y el mundo femenino en ella.
La Magli --que se levanta todos los días a las cuatro de la mañana tal como lo hacían los monjes para cumplir con Dios-- rinde culto a la ciencia y no acepta los lugares comunes ni los senderos trillados y lo prueba en su polémica versión de María, la madre de Jesús.
Según el libro en cuestión, el comportamiento de Jesús con las mujeres es siempre el mismo, las invita a participar de un verdadero conocimiento de los contenidos religiosos que son todo uno con los significados de la vida. Pero los trata de manera diferente, con un respeto, una delicadeza, una dulzura que son totalmente contrarias a la vigorosa y hasta violenta apelación que hace a los hombres para que le crean sin sombra de duda. Esto se explica porque Jesús sabía muy bien "cuáles eran las condiciones de inferioridad y dependencia en que eran mantenidas las mujeres, quienes para entenderlo debían superar el tremendo límite que las mantenía fuera de la vida social ".
Por otra parte, la Magli sostiene que Jesús no consideraba imprescindible el conocimiento, entonces legitimado como único, de las Escrituras. A las mujeres, de hecho, les era negado todo tipo de conocimiento real en el sentido racional, filosófico, de las leyes a que estaban sometidas. De allí el entusiasmo de María Magdalena, la Samaritana, la hermana de Lázaro ante la posibilidad de establecer con el entorno una relación liberadora y de sujeto, ser persona por fin.
El aporte polémico y renovador del trabajo de la Magli no se limita a la cátedra universitaria donde enseña ante salones atestados por cientos de alumnos, ni a la publicación de libros que desatan cataclismos académicos.