Cultura
La bendecida oración al arcángel San Miguel para conciliar el sueño más rápido
Este ejercicio debe realizarse antes de dormir.
La oración, en la religión cristiana y católica, es considerada el camino perfecto para conectar con Dios y expresar los pensamientos que hay en el momento. Este canal de comunicación es el indicado para encomendar las intenciones y peticiones que se tienen respecto a distintos temas.
Más allá de solo pedir, es importante contemplar la oración como un espacio privado e íntimo con el altísimo, agradeciendo por las bendiciones que se reciben en el día a día. Las palabras son fundamentales al momento de plasmar temores, angustias, alegrías y esperanzas, recibiendo un alivio espiritual.
Existen todo tipo de mensajes y textos religiosos que se pueden realizar en momentos del día, generando una satisfacción personal. A la hora de dormir, en caso de no conciliar el sueño, se puede acceder a la oración y así ayudar a que la mente descanse.
De hecho, orar cuando se va a ir a la cama es de las acciones que más repiten los religiosos, buscando estar acompañados y protegidos por los seres celestiales. Mediante varias palabras, los creyentes entablan comunicación con Dios para dar las gracias por un día más de vida, mientras que, a su vez, piden tener una cálida noche sin pesadillas o insomnio.
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Uno de los caminos apropiados es dirigirse a los arcángeles, mensajeros de Dios, para que sean compañía y refugio en estos momentos difíciles en los que dormir no es fácil. San Miguel Arcángel es a quien se le encomiendan estos instantes, respaldando el descanso y la desconexión interna.
Oración para poder dormir bien y conciliar el sueño
En primer lugar, te doy alabanza honra y honor por siempre para poder dormir bien y tranquilo, oh, mi santo que eres bondadoso y bueno, te pido que nos ayudes para siempre estar tranquilos, porque sin ti, no podría dormir cómodo y tranquilo. Oh, San Miguel Arcángel, te pido paz y armonía para siempre dormir relajado.
Oh, Amado Santo, te alabo con mucha fe y alegría, porque tú eres un Santo muy bueno; en esta noche de estrellas te pido San Miguel que nos protejas para no tener la conciencia sucia. Además, te pido que siempre estés pendiente de todos nosotros.
Tú que eres mi protector, ayúdanos para que todas las noches nos podamos acostar sin preocupaciones; oh, amabilísimo Miguel, te pido que cuides mi sueño para siempre dormir tranquilo. También, ayúdanos para que cada día estemos más cerca de Señor; te pido que escuches mis plegarias para acostarme en paz.
Oh, virtuoso Arcángel, cubre mi sueño con tu escudo y espada, porque asimismo como nos proteges del mal, podrías ayudarnos con los sueños; en esta hora y en este lugar, te pido que cuides y vigiles mis sueños, en compañía de tus ángeles y arcángeles, no permitas que fuerzas negativas y personas envidiosas me hagan daño.
También te pido que me protejas esas horas que estoy dormido, que no me invadan malos sueños y pesadillas; oh, San Miguel Arcángel, deja que mis sueños sean buenos y felices, ya que así podré descansar todas las noches con tranquilidad.
Oh, bendito Santo, ayúdame a que siempre pueda despertar con un buen estado de ánimo, tú que eres bueno y siempre estás pendiente de todos tus fieles; asimismo, te pido que puedas ayudarnos para que todos los días podamos dormir muy bien.
Tú, Santo Miguel, que eres guerrero y bondadoso, desvía esos malos sueños que tenemos al dormir; oh, príncipe de la milicia celestial San Miguel, tú eres como Dios, pues luchas por la verdad y la justicia en el mundo para que no exista la maldad, por eso te pido que me protejas a mí y a toda mi familia.
A ti, Miguel Arcángel, te pido que me protejas en mis noches y en mis días, ya que con tu ayuda podré descansar con tranquilidad. Bendito San Miguel, defiéndenos en el día del combate, porque no nos perdamos en el terrible juicio.
Oh, ángel de Dios, te agradezco por todo lo que has hecho por todos nosotros, también te doy gracias por tu infinita sabiduría que nos has dado, y por atender todas las cosas y peticiones que te rogamos para que nos ayudes.
Te agradezco por tu infinita bondad porque siempre me alcanza; asimismo, bendito Santo, agradezco todas las cosas que has hecho por mí y toda mi familia. Gracias porque tú eres bueno y porque tu misericordia me acompaña cada uno de mis días. Amén.