La poderosa oración que se debe realizar en las mañanas para empezar el día de la mano de Dios

Las creencias religiosas son de los temas que más sobresalen en la cultura popular. Por ello, entre las prácticas más comunes se encuentra la de recibir el día con una oración a Dios.

Una oración es una plegaria y a la vez rezo que se hace con el objetivo de entablar comunicación con el todopoderoso. De acuerdo con la organización Compellingtruthm, se debe incrementar la espiritualidad, de modo que entre más se ora más se siente a Dios cerca.

“La oración es una piedra angular de la vida cristiana porque Dios nos dice en la Biblia que él quiere ser conocido. Orar es reconocer su presencia en su vida y hacer crecer su relación con él”, explican los conocedores del tema.

¿Por qué orar al inicio del día?

Teniendo en cuenta datos compartidos en Catholic.net, agradecer a Dios por un nuevo día debería convertirse en un hábito lleno de gozo y armonía.

En otras palabras, en la cultura religiosa se considera que cada día es la oportunidad para ser una mejor persona, pero también para reconocer el regalo de la vida, según la voluntad del todopoderoso.

Entonces, orar al inicio de un día resulta ser importante tanto para agradecer como para pedir ayuda a Dios. “El sol naciente nos recuerda que Cristo ha resucitado, que Dios ha vencido las tinieblas de la muerte”, consigna el citado escenario digital.

Así las cosas, con el paso del tiempo, hay oraciones que sobresalen por encima de otras porque resultan ser más poderosas. Por ejemplo, con el rezo compartido a continuación las personas podrán disponerse en mente y corazón cada mañana y, por lo tanto, empezar el día de la mano de Dios.

Oración de voluntad y agradecimiento a Dios para empezar el día

Padre amado, gracias por este nuevo día de vida. Tú más que nadie sabes lo que acongoja mi corazón. Sin embargo, en este momento no quiero pedirte nada; quiero ofrecerte mis manos para que en el trabajo que realice con ellas, te veas reflejado tú.

Quiero ofrecerte mis pies, para que en los caminos que recorra siembre tu palabra. Te entrego mi mente para que la preserves de todo pensamiento maligno que me quiera alejar de ti.

Señor, mis fuerzas pueden quedarse cortas, pero si tú vas conmigo, puedo enfrentarlo todo. Te invito, mi Dios, a que me acompañes en este nuevo día. Que todo sea según tu santa voluntad. Todo me lo has dado, todo te pertenece. Concédeme a mí y a mis seres queridos la gracia de volver a casa sanos y salvos.

Amén.

¿Qué actitud se debe tener al momento de orar cada día?

Al ser la oración un momento de conexión con el todopoderoso, características como la actitud y disposición deben tenerse en cuenta.

Para los religiosos, no es lo mismo hablar con Dios con tiempo que con afán, de modo que la recomendación es orar despacio, al igual que dándole sentido y significado a cada palabra que se recite.

Por su parte, Catholic.net señala que en la mañana las actitudes fundamentales que un orador debe tener son las siguientes:

• Bendición y alabanza: para expresar el amor y la creencia que se tiene ante Dios.
• Ofrecimiento: “decirle que, hagamos lo que hagamos, queremos hacerlo para su gloria; que unimos nuestros pensamientos, nuestros sentimientos y nuestros actos a los de Cristo, con el deseo de ser alabanza de su gloria”.
• Súplica: corresponde a reconocer a Dios en el corazón, la mente y el espíritu; además, reconocer la grandeza del todopoderoso y repetir la frase: ‘sin ti nada puedo, contigo todo lo puedo’.
• Confianza: pese a las adversidades, confiar en que Dios tendrá la solución en el momento adecuado.