Fernando Savater será el invitado de honor al seminario 'Educación para el próximo milenio', que preside la organización Ateneo Porfirio Barba Jacob y que se llevará a cabo en Medellín entre el 27 y 29 de octubre. SEMANA habló con él.Semana: Muchos lo llaman el filósofo de lo obvio, ¿qué opina al respecto?Fernando Savater: Yo sólo soy un profesor que busca hacer inteligible las cosas a un público amplio que se interesa por ellas. A partir de allí hay muchos niveles de aprendizaje. La filosofía es como las matemáticas, hay cosas elementales y complejas. Yo sólo quiero que las cosas sean fáciles.Semana: Algunos critican su posición antiecologista, ¿a qué se debe ello?F.S.: A mí me parece muy lógico proteger los elementos del medio ambiente como los bosques, evitar la contaminación de los mares, en fin. Pero a veces hay unos ecologistas que crean una especie de idolatría hacia la naturaleza como si fuera algo que nosotros podemos destruir, cosa que no es cierto porque nosotros no podemos hacer daño a la naturaleza. Ella nos puede hacer daño a nosotros. Semana: Una de las cosas en las que usted más insiste es que no hay pérdida de valores, pero que sí ocurre un fenómeno con ellos ¿a qué se refiere?F.S.: La idea de que los valores se van perdiendo es errada. Una cosa es que en el mundo haya personas que se comporten de una forma contraria a los valores que nosotros tenemos y otra cosa es decir que han desaparecido. Queremos países justos, creemos que la justicia es un valor, como la libertad, pero las dos se oponen. Son importantes los gestos de solidaridad con otros pero también tenemos valores que repliegan nuestra propia identidad.Semana: ¿Qué propuestas educativas se pueden plantear para el otro siglo?F.S.: Yo no creo que los cambios se deban a una cuestión de calendario. Lo del milenio es una convención. Lo que hay que hacer es una labor conjunta que supere a los institutos y a los colegios. La educación debe ser algo que nazca en la familia y en los medios de comunicación.Semana: En muchos países se ha cambiado el sistema de calificación de los estudiantes. Se ha dado paso a una evaluación cualitativa ¿qué opina?F.S.: En líneas generales es verdad que hay una educación que fomenta más la capacidad de pensar, de interpretar un texto, en donde se aprende a pensar, y no simplemente a aprender, como almacenamiento de fechas e informaciones. Esto es positivo pero también es erróneo pensar que la memoria es algo contrario a la inteligencia. Hay muchísimas cosas que debemos recordar, por ejemplo el propio lenguaje. No hay que abusar de lo mecánico pero tampoco obviar cosas tan elementales como saber que París es la capital de Francia.Semana:¿Cómo ve a las nuevas generaciones respecto a las anteriores?F.S.: No hay que generalizar, pero hay que evitar los clichés históricos como lo que sucedió en 1968 con los jóvenes. Cada generación es importante. Hoy muchos jóvenes están luchando a través de organizaciones no gubernamentales, viajan como cooperantes. En fin, muchos hacen el mundo mejor aunque su labor sea silenciosa, y eso es muy valioso.