Cine
Arrancó el Bogotá International Film Festival
Arcadia habló con Andrés Bayona, director del Bogotá International Film Festival -BIFF-, sobre la historia del que se ha consolidado como uno de los festivales de cine más importantes del país, y los detalles de esta sexta edición, que va hasta el 14 de octubre.
Esta es la sexta edición del BIFF, ¿cómo se ha ido afianzando en su identidad el festival, y que hay nuevo este año?
Como en los grandes festivales del circuito internacional, el BIFF se ubica dentro de los eventos cinematográficos que incluyen en su sección oficial, títulos de alta calidad artística, que responden a criterios específicos de curaduría y que atienden al público de espíritu joven, al que principalmente está dirigido este evento.
Nuestras películas son arriesgadas, apasionadas, enérgicas, y muy rara vez entran al circuito comercial.
Le apostamos sobre todo a las primeras realizaciones de jóvenes directores.
Tendencias
La columna vertebral del festival sigue siendo las secciones Espíritu Joven y Colombia Viva, que se han consolidado como una vitrina fundamental para el estreno nacional de las últimas producciones colombianas.
Como resultado de la coyuntura, nuestro programa BIFF KIDS, que enseña apreciación cinematográfica a los estudiantes de los colegios públicos de Bogotá, llegará este año de la mano de Señal Colombia a todo el país. Es la primera vez que lo hacemos así.
Persiguiendo el objetivo de acercar el audiovisual a otras áreas de la creatividad humana, somos pioneros en la organización de Cine Conciertos, exhibiciones de cine silente acompañadas de los músicos de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo. Y como novedad este año, creamos la sección Mirandas expandidas, en la que presentamos películas que disuelven los límites entre el lenguaje audiovisual y otros campos de la creación. La curaduría de esta última se hizo en conjunto con ARTBO, el programa de artes plásticas de la Cámara de Comercio de Bogotá.
Cuéntenos sobre la curaduría de este año. ¿Qué va a poder ver el público?
El BIFF, debido a las circunstancias excepcionales, redujo el número de películas de su sección oficial pero incluye en su programación, títulos que han dado de qué hablar en el último año del circuito cinematográfico mundial. Por ejemplo, Yalda, A Night for Forgiveness, ganadora de la pasada edición del Festival de Sundance. Siberia, de Abel Ferrara, repitente en el BIFF. Es una película que viene de la Sección Oficial en Competencia del Festival de Berlín, y que abre el festival en esta sexta edición. Jia Zhangke, Irene Gutiérrez, Luis López Carrasco y Gustavo Vinagre, presentan trabajos que irrumpen en sus narrativas y nos trasladan a otros tiempos y a otras geografías.
En esta edición, el BIFF pretende ser una ventana que nos saque del encierro.
Cuéntenos un poco más sobre la nueva sección Mirandas expandidas. ¿De dónde surge la idea de hacerla y qué tipo de obras va a encontrar el público?
Por primera vez en el BIFF, y en colaboración con ARTBO, las dos entidades organizaron una curaduría conjunta para incluir en la programación oficial de los dos eventos, las películas que se deslizan entre el documental y la ficción, lo experimental y lo narrativo, entre el cine y las artes plásticas. Será la sección preferida de los artistas visuales de nuestro país.
Aberración cromática, Printed Sunset y Mirror Travelling, componen la trilogía del joven realizador Andrés Baron, que junto con As Far as We Could Get de Iván Argote, estrenaron sus trabajos en la pasada edición del Festival de Rotterdam. La sección la complementan Truth or Consequences y Accidental Luxuriance of the Translucent Watery Rebus, dos obras impactantes que refrescan la forma de contar historias a través de animación no tradicional.
El BIFF tiene un importante componente académico. ¿Cómo va a ser este año, qué temas se van discutir y cuáles talleres se van a realizar?
Uno de los objetivos fundamentales del festival es intentar descubrir los jóvenes talentos que harán parte de la industria en un futuro cercano. Para ello creamos -junto con el Centro Ático de la Universidad Javeriana- un programa académico que hace parte del festival, y que llamamos BIFF BANG.
Los talleres se plantean anualmente con el interés de formar los talentos que la industria cinematográfica nacional necesita, y que la Academia no está formando en sus aulas. Desde su inicio, el BIFF BANG ha priorizado estratégicamente los talleres de Escritura de Guion para Cortometraje, Producción Ejecutiva para Cortometraje y el Taller de Crítica Cinematográfica.
Este año se complementan con los talleres de Flujos de Trabajo para Stop Motion y el Taller de Video Expandido-Videomapping, dos de los lenguajes creativos que están utilizando los nuevos realizadores para contar sus historias.
¿Qué impacto ha tenido el BIFF BANG en estos años de trabajo?
Como resultado del Taller de Escritura de Guion, en 2018 se estrenó en el BIFF el cortometraje Ausencia, de Andrés Tudela, quien actualmente se encuentra rodando su primer largometraje: El cantante de champeta.
Varios egresados del taller de crítica están escribiendo actualmente para los medios especializados más importantes del país, y otro tanto han sido ganadores de las convocatorias del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico-FDC en la realización de sus primeros trabajos.
Los talleres se realizan con el apoyo de las diferentes asociaciones profesionales de la industria audiovisual, y al final del ejercicio, los mejores estudiantes de la presente edición, representarán al BIFF en el Programa NEST del Festival de Cine de San Sebastián, y en el Málaga Talents del Festival de Cine de Málaga, ampliando las posibilidades de coproducción y financiación internacional para sus proyectos.
En este Foro de Industria el tema principal será la actual crisis que está viviendo el cine debido a la pandemia. ¿Cómo se va a sumar el BIFF a esa discusión mundial?
El BIFF es el resultado de los intereses de las diferentes asociaciones profesionales del sector audiovisual, y el Foro de Industria ha generado el espacio para el debate de las ideas y actividades que generan nuevas propuestas para el empleo sectorial, la capacitación profesional, la promoción de los bienes y servicios audiovisuales, y el apoyo al posicionamiento de Bogotá como una locación fílmica para los rodajes internacionales.
La coyuntura nos ha impuesto temas para la nueva normalidad, y nos confirmó invitados de primera categoría: los gerentes de RTVC y de Canal Capital, como representantes de las televisiones públicas, el presidente de Cinemark para Colombia, los distribuidores Cineplex y Cinecolor-Disney, entre otros. Abordarán el espinoso tema de la distribución de contenidos audiovisuales bajo las condiciones actuales del mercado.
Numerosas producciones detuvieron sus rodajes como consecuencia de la pandemia y ahora vienen los nuevos protocolos de desescalamiento que, sin duda, afectarán todos los cronogramas en las producciones que tuvieron que parar. La experiencia internacional es invaluable y la directora de la Andalucía Film Commission, que acoge en su territorio numeroso rodajes de Hollywood, podrá compartir sus experiencias en la nueva normalidad en España.
Con el apoyo del Ministerio de Cultura y la Comisión Fílmica de Bogotá, se pretende abordar el tema de los asocios como engranaje fundamental de la industria audiovisual, el de los servicios de posproducción como parte de una estrategia futura de promoción internacional.
Finalmente, el director del BIFF, tendrá un mano a mano culinario con el director del Festival de Cine de San Sebastián, la puerta de entrada del cine latinoamericano para el complejo mercado europeo.
Cuéntenos sobre el proyecto que están comenzando a desarrollar con la Fundación Gilberto Alzate Avendaño-FUGA.
Desde su constitución orgánica, el BIFF responde al público y al territorio donde se lleva a cabo el evento. En ese sentido, compartimos valores con la FUGA, que pretende desarrollar e incentivar proyectos que promocionen las localidades de Los Mártires, La Candelaria y Santa Fe, ubicadas en el centro de la capital.
Parte del ejercicio académico del Taller de Video Expandido-Videomapping, consiste en utilizar como lienzo la fachada del edificio de la Antigua Facultad de Medicina, que está en el Bronx Distrito Creativo.
La idea es que en el futuro, ese espacio sea en escenario de proyecciones audiovisuales extraordinarias, y que verlas se convierta en todo un evento para los bogotanos y quienes visiten la ciudad.
De igual manera, como el área de influencia de la FUGA abarca gran parte de las universidades y centros educativos de Bogotá, y el público universitario corresponde al mismo segmento con el que el BIFF trabaja permanentemente en sus talleres, las dos entidades están planteando desarrollar proyectos que desde la realización audiovisual, promocionen a futuro el centro de la ciudad, generen pertenencia y rescaten personajes y edificaciones que desde el audiovisual los valores de nuestra ciudad.
Más información en la página del evento.