Los salmos es una composición poética.
Los salmos son composiciones poéticas. | Foto: Getty Images

Cultura

Los cuatro salmos poderosos que todo católico debe saber de memoria

A través de la palabra de Dios, el creyente encuentra descanso y guía.

Redacción Semana
8 de septiembre de 2023

La Biblia es el libro más importante para el creyente, ya que en él conoce a su creador y afianza su relación con él. Incluso encuentra alabanza y adoración en libros como los Salmos, una composición poética en la cual el autor expresa lo que siente.

De ahí, que para un total de 150 salmos, este apartado bíblico es el más buscado y recitado por muchos creyentes, por lo cual el portal Aleteia menciona que los siguientes deben ser memorizados, ya que hacen parte de la liturgia eclesiástica, siendo necesarios en momentos de dificultad o alegría:

Los siguientes cuatro salmos son los más poderosos que un católico debe aprender:

Salmo 23

En este salmo el rey David expresa y reconoce quién es Dios en su vida:

“El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce; me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia haciendo honor a su nombre. Aun si voy por valles tenebrosos, no temeré ningún mal porque tú estás a mi lado; tu vara y tu bastón me reconfortan.

Dispones ante mí un banquete en presencia de mis enemigos. Has ungido con aceite mi cabeza; has llenado mi copa a rebosar.6 Seguro estoy de que la bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del Señor habitaré para siempre”, se puede leer en la versión bíblica Nueva Versión Internacional (NVI).

Al finalizar el día, es importante darle gracias a Dios por los favores recibidos y también entregarle las peticiones.
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Salmo 130

Es importante recordar que no todos los salmos fueron escritos por el rey David, como en este caso que, tal y como lo indica la Biblia, es un cántico de los peregrinos:

“A ti, Señor, elevo mi clamor desde lo más profundo de mi ser. Escucha, Señor, mi voz. Estén atentos tus oídos a mi voz suplicante. Si tú, Señor, tomaras en cuenta los pecados, ¿quién, Señor, se mantendría en pie? Pero en ti se halla perdón, y por eso debes ser temido.

Espero al Señor, lo espero con toda el alma; en su palabra he puesto mi esperanza. Espero al Señor con toda el alma, más que los centinelas la mañana. Como esperan los centinelas la mañana, así tú, Israel, espera al Señor, porque en él hay amor inagotable; en él hay plena redención. Él mismo redimirá a Israel de todos sus pecados”.

Rezar
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Salmo 117

En estos versículos, el salmista exalta los atributos de Dios:

“¡Alaben al Señor, naciones todas! ¡Pueblos todos, cántenle alabanzas! ¡Grande es su amor por nosotros! ¡La fidelidad del Señor es eterna! ¡Aleluya!”.

Conozca los beneficios espirituales de la oración.
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Salmo 51

El siguiente texto es un fragmento del salmo, en el cual el rey David reconoce su pecado de adulterio con Betsabé:

“Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu gran amor; conforme a tu misericordia, borra mis transgresiones. Lávame de toda mi maldad, y límpiame de mi pecado.

Yo reconozco mis transgresiones; siempre tengo presente mi pecado. Contra ti he pecado, solo contra ti, y he hecho lo que es malo ante tus ojos; por eso, tu sentencia es justa, y tu juicio, irreprochable. Yo sé que soy pecador de nacimiento; pecador, desde que me concibió mi madre. Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo; en lo secreto me has enseñado sabiduría”, se puede leer en los primeros 6 versículos.