Las creencias religiosas cumplen un papel crucial en la vida de las personas. En Colombia, el catolicismo es la religión con predominancia, lo cual hace que sea un asunto importante en la sociedad.
Como tal, creer en alguna deidad es un modo de sentir la presencia de apoyo espiritual. En la religión católica, la influencia que puede tener la oración es tan grande que las personas creyentes sí sienten un cambio en sus vidas al momento de encomendarse.
Estar en paz a nivel espiritual es un asunto necesario para gozar de tranquilidad, por lo tanto, el rezo se convierte en una acción diaria para sentir la protección espiritual. En ese orden de ideas, dejar en manos de Dios las cosas, es una manera de sentir la fortaleza necesaria para afrontar las diferentes adversidades de la vida.
Hay gente que tiene estrés o inquietud por el trabajo o estudio. Para controlar eso, una oración les ayuda a encontrar esa paz y estar preparados para lo que venga. Bajo ese contexto, estos son los mejores salmos para iniciar la semana de la mejor manera posible:
Salmo 5:
Señor, de madrugada ya escuchas mi voz: por la mañana te expongo mi causa y espero tu respuesta. Tú no eres un Dios que ama la maldad; ningún impío será tu huésped.
Salmo 5:9:
Guíame, Señor, por tu justicia, porque tengo muchos enemigos: ábreme un camino llano.
Salmo 23:
Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará.
Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente, el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días.
Salmo 25, 4 - 5:
Indícame el camino por donde debo andar. ¡Guíame por medio de tu verdad, enséñame! Porque tú eres el Dios que me da salvación; en nadie, si no en ti, tengo esperanza todo el día.
Salmo 30:4-5:
Canten al Señor, sus fieles; den gracias a su santo nombre, porque su enojo dura un instante, y su bondad, toda la vida: si por la noche se derraman lágrimas, por la mañana renace la alegría.
Salmo 97: 11 - 12:
Nace la luz para el justo, y la alegría para los rectos de corazón. Alégrense, justos, en el Señor y alaben su santo nombre.
Salmo 145:1-3:
Te alabaré, Dios mío, a ti, el único Rey, y bendeciré tu Nombre eternamente.
Día tras día te bendeciré, y alabaré tu Nombre sin cesar. ¡Grande es el Señor y muy digno de alabanza: su grandeza es insondable!
Salmo 143:8
Que yo experimente tu amor por la mañana, porque confío en ti; indícame el camino que debo seguir, porque a ti elevo mi alma.