Cine
“Minari”: el sueño americano desde la perspectiva coreana y una planta como su metáfora
Young Yuh- Jung se convirtió en la primera actriz surcoreana en llevarse el Óscar, y sí que lo justifica en una cinta que refleja, desde el prisma de una familia, los choques y encuentros entre distintas generaciones de inmigrantes.
Minari (2020), dirigida por Lee Isaac Chung, contaba con 6 nominaciones a los premios Oscar 2021. De estos, recibió uno: la actriz Young Yuh- Jung se llevó la estatuilla a Mejor Actriz de Reparto por su interpretación de Soon-Ya, la carismática abuela de David y Anne.
La película ambientada en los años ochenta narra el momento en que una joven pareja coreana, Jacob (Steven Yeun) y Monica (Han Ye-ri), junto a sus hijos Anne (Noel Kate Cho) y David (Alan Kim) se mudan de California a una granja de Arkansas en busca de mejores oportunidades. La cultura de los niños oscila entre la coreana y la americana, pero afirman sus raíces con la llegada de su abuela Soon-Ya (Young Yuh- Jung).
Minari es el nombre de una planta utilizada comúnmente en la cocina asiática. Esta renace y crece con más fuerza en su “segunda temporada” y sirve como una metáfora de la historia que Chung cuenta en su película y que, con anécdotas autobiográficas, recrea un universo alrededor de una familia de inmigrantes.
Dediqué toda una tarde a escribir mis recuerdos de la infancia. Recordé la llegada de nuestra familia a una caravana en un prado de Ozark y la conmoción de mi madre al saber que este sería nuestro nuevo hogar. Recordé el olor de la tierra recién arada y la forma en que su color agradaba a mi padre. Recordé el riachuelo donde arrojé piedras a las serpientes mientras mi abuela plantaba un vegetal coreano que crecía sin esfuerzo
“Dediqué toda una tarde a escribir mis recuerdos de la infancia. Recordé la llegada de nuestra familia a una caravana en un prado de Ozark y la conmoción de mi madre al saber que este sería nuestro nuevo hogar. Recordé el olor de la tierra recién arada y la forma en que su color agradaba a mi padre. Recordé el riachuelo donde arrojé piedras a las serpientes mientras mi abuela plantaba un vegetal coreano que crecía sin esfuerzo”, escribió Chung en un ensayo para el diario LA Times.
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La búsqueda del sueño americano
El calor se siente a lo largo de la película. El sonido de los grillos, las gotas de sudor, la insaciable sed por “el agua de la montaña” (Mountain Dew) hacen que el espectador se sitúe físicamente en un ambiente sofocante.
Pero, ¿por qué una familia coreana emigraría a Estados Unidos en busca de una mejor vida? Los rezagos de una guerra y de una dictadura, dejaron al país con una creciente población sin muchas oportunidades para salir adelante. Esto llevó al Estado a promover la emigración como una salida a la situación sociopolítica en la que se encontraba el país durante la década de los ochenta.
La búsqueda del sueño americano desde la perspectiva de Minari se asocia con la agricultura. En las películas latinoamericanas, el sueño americano se suele retratar desde la ilegalidad. Este no es el caso.
Una casa con ruedas en la mitad de la nada es el nuevo hogar de la familia, rodeados de un bosque y un riachuelo. Jacob elige su nuevo hogar por el terreno, un espacio amplio que le permitirá cultivar frutas y vegetales coreanos para comercializarlos a mercados asiáticos.
Aunque Monica se ve decepcionada por su nuevo hogar, acepta su nueva vida y su trabajo sexando polluelos en un criadero. La meta de este esfuerzo es conseguir el dinero suficiente para los tratamientos de su hijo, quien padece una enfermedad cardíaca.
Además de sentir la presión por sobrevivir en un país ajeno, en donde debe adaptarse a una nueva cultura, Jacob también vive con la presión tradicional coreana, ser el padre que puede ser capaz de sostener a su familia sin fracasar en el intento.
—¿Qué es eso? Pregunta David al ver una humareda saliendo de una chimenea en el criadero de pollos.
—¿Eso? Los polluelos macho son descartados allí. Le responde Jacob.
—¿Qué es descartado?- Pregunta nuevamente David. —Es una palabra difícil, suspira Jacob, —Los machos no tienen buen sabor, no pueden poner huevos, no sirven para nada. Así que tu y yo debemos tratar de ser útiles.
Entre amores y odios
Los coreanos hablan de generaciones cuando se refieren a las familias migrantes. Se denomina primera generación a quienes salieron de Corea hacia otro país, segunda generación a los hijos de estas personas y así sucesivamente.
En Minari, la llegada de la abuela provoca un choque cultural en la segunda generación. Pues los niños, ya coreano-estadounidenses, preservan el idioma natal, pero sus tradiciones y costumbres son más americanas. Se encuentran en un limbo identitario, no son lo suficientemente coreanos para ser coreanos ni americanos para ser americanos.
David, al ser un niño con poco conocimiento de su cultura natal, supone que su abuela sería una dulce anciana que preparan galletas, como las muestran en la televisión americana. Pero se encuentra con Soon-Ya, una abuela que maldice, que no sabe cocinar, que le prepara infusiones con cuernos de venado y su mayor habilidad es jugar a las cartas Go!
Él, en su malestar por la intrusa, se comporta como un malcriado capaz de gritar que no quiere dormir con ella porque “huele a Corea” y que no tiene lío en jugarle travesuras. Esto es algo que jamás se vería en una producción meramente coreana pues culturalmente a los mayores siempre se les expresa respeto, desde el lenguaje hasta en las tradiciones en la mesa.
No obstante esa tensión inicial, la relación entre el niño hacia su abuela se hace más cercana cuando ambos plantan unas semillas de minari cerca al riachuelo. Este pequeño cultivo se vuelve su secreto.
Poco a poco Soon-Ya introduce a Corea en sus nietos, con sus platillos, su forma de dormir, sus dichos, sus juegos. Ellos aceptan y abrazan esa multiculturalidad; tanto que David le enseña las cartas Go! a su único amigo americano, e imita a su abuela con la misma emoción con la que ella juega.
Minari relata una perspectiva que puede aplicarse a cualquier familia migrante. Muestra las luchas por sobresalir en un espacio ajeno, las crisis de identidad, el constante enfrentamiento con el racismo como también demuestra una unidad especial en la familia. Después de todo, son ellos contra el mundo entero.
*Se estrenó esta semana en Colombia