Oración
Oración de agradecimiento a Dios por su cuidado y su amor
La oración es el principal vínculo entre Dios y sus fieles seguidores.
Para los creyentes de Dios y devotos en la fe católica es muy importante la comunicación con el Creador y por medio de la oración se abre este canal espiritual que conecta el amor de Dios con las peticiones y las aclamaciones de sus más fieles seguidores.
Es por ello que en cada oportunidad que la vida presenta, así sea negativa, hay que agradecerle a Dios por las bendiciones o vicisitudes que presenta a diario, pues Él es quien diseña el camino divino para poder llegar al anhelado encuentro en la eternidad.
Muchas veces las personas recurren a quejarse por una serie de inconvenientes o simplemente porque las cosas no les están saliendo tal cual lo tenían planeado. Es normal sentir frustración por este tipo de eventos, pero lo importante es no reprochar y entender que este es el camino que escogió Dios y que, muy seguramente, Él tendrá algo mejor para cada uno.
Es por ello que a continuación se presenta una oración de agradecimiento a Dios por su cuidado y su amor: es importante dedicar un espacio a diario para agradecer a Dios por su infinito amor y protección.
Oración de agradecimiento a Dios
Gracias te doy, Padre amado, por tu gran bondad y por tu amor. Mi corazón se llena de gratitud cada vez que pienso en ti y en tu cuidado para conmigo y para con todos los que amo. Gracias porque me acompañas cada día, cada noche y en medio de todas las situaciones que enfrento día tras día.
Gracias por todas las formas en las que me muestras tu amor y tu cuidado. Gracias por las personas que forman parte de mi vida, mi familia, mis amigos, mis vecinos, los hermanos de la iglesia. Gracias por el ánimo que ellos me dan y porque yo también puedo ser de bendición y de apoyo para ellos en todo momento. Gracias porque contigo mi vida tiene propósito. Quiero aprovecharla al máximo y vivir siempre dentro de tu voluntad.
Te agradezco también por la naturaleza que me rodea. Gracias por las bellas montañas, el aire fresco que puedo respirar, el cantar de los pájaros, el cielo azul... Ver tus obras maravillosas me renueva las fuerzas y me llena de paz. Gracias por ser un Dios tan creativo y por permitirme disfrutar de todo lo que has creado.
Te amo y te alabo, mi Señor y mi Dios. Estoy feliz de ser tuyo por la eternidad. En el nombre de Jesús, amén.