Oración en familia
Las oraciones en familia son de las más poderosas para los cristianos. | Foto: Getty Images

Cultura

Oración para pedir ayuda a Dios en momentos difíciles

Muchos creyentes afirman que estas palabras los han ayudado a solucionar situaciones complicadas.

Redacción Semana
21 de septiembre de 2023

Todas las personas suelen atravesar diversas y diferentes situaciones difíciles a lo largo de su vida, las cuales pueden llevarlas a la desesperación al no saber cómo reaccionar a las mismas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, pese a que algunos problemas parezcan no tener solución en un primer momento, se debe mantener la calma ante las adversidades y conectar con Dios para sentir paz y tranquilidad a la hora de tomar ciertas decisiones.

Son muchos los testimonios que han compartido que las oraciones y conexión con las divinidades han cambiado por completo sus vidas y les han dado esperanza y fuerza cuando pensaron que sus circunstancias no cambiarían.

Las Escrituras describen como Dios hizo la creación.
Las Escrituras describen cómo Dios hizo la creación. | Foto: Getty Images

La realización de oraciones y lectura de salmos son una especie de canal de comunicación y conexión con los seres de luz, para los que creen en la existencia de un Dios superior, al que pueden comunicarle cualquier inquietud, miedo o dolor que sientan en el alma y el corazón.

Oración para los momentos difíciles

Oh Dios, creador del universo, fuente de luz y amor, en este momento vengo ante ti con mi corazón lleno de preocupaciones y tristezas. Me siento abrumado por los problemas que me rodean y encuentro difícil pensar con claridad.

Te pido que me des la fuerza necesaria para superar estos momentos difíciles y para no perder la fe en tus planes para mí. Ayúdame a ser valiente ante los desafíos que enfrento, a tener la sabiduría para tomar decisiones acertadas y la paciencia para esperar tus respuestas.

La sabiduría que Dios ofrece tiene la capacidad de guiar por el buen camino.
La sabiduría que Dios ofrece tiene la capacidad de guiar por el buen camino. | Foto: Getty Images

En este momento de angustia, te pido que me des tu mano y me muestres el camino que debo seguir para encontrar la paz y la felicidad. Si hay algo que deba aprender de esto, te pido que me lo reveles con prontitud. Si hay algo que se deba cambiar en mi vida, concede que tenga el valor para hacerlo. Permíteme sentir tu amor y tu presencia en mi vida.

Te agradezco por siempre estar a mi lado, por escuchar mis oraciones y por darme tu amor incondicional en mi momento de necesidad. Hoy te entrego todas mis preocupaciones y problemas, confío en que con tu ayuda, todo saldrá bien. Amén.

¿Qué hacer después de realizar la oración?

Los expertos en el tema han recalcado en varias ocasiones que el hecho de realizar una oración no va cambiar la situación si la persona no pone de su parte por medio de sus acciones. Por lo tanto, después de tener la conexión espiritual con Dios debe llevar a cabo un plan de mejora personal, el cual le ayude a encontrar soluciones y pasos a seguir para solucionar sus inconvenientes.

Se recomienda también buscar ayuda en personas de su confianza, que quieran acompañarlo en la práctica de la oración y brindarle apoyo en los temas que necesite, pues estas podrán darle una mano para encontrar un camino de paz, luz y tranquilidad.

Algunos católicos practican varias oraciones.
Algunos católicos practican varias oraciones. | Foto: Getty Images

Otra oración que se considera poderosa en este tipo de casos es el Salmo 23, pues es una de las lecturas referentes de la Iglesia católica y es utilizada especialmente en momentos complicados.

Salmo 23

El Señor es mi pastor,nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce. Él restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de Su nombre.

Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento. Tú preparas mesa delante de mí, en presencia de mis enemigos; has ungido mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del Señor moraré por largos días.