¿Qué dice la Biblia sobre orar en secreto?

Para los creyentes en algún tipo de religión, sobre todo para los católicos, la oración se convierte en el canal o el medio directo para comunicarse con Dios y es una de las herramientas para agradecer por las bendiciones recibidas a diario, pedir por las necesidades y clamar por las urgencias que aflige a cada una de las personas.

En este punto es importante destacar que fue el mismo Jesús quien, como enseñanza, dejó la oración como un patrón a seguir a quienes le siguieran en todo el mundo. Más allá de recitar peticiones de memoria, el hijo de Dios manifestó que orar es el camino para que las cosas esperadas se hagan realidad.

Asimismo, uno de los apóstoles de Jesús y evangelista en la Biblia destaca que la oración tiene más poderes cuando se hace en secreto, pues “tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”.

“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis”, Mateo 6:6-13.

Asimismo, Jesús enseñó que la oración debe ir dirigida a Dios padre y esto lo confirma Juan en 14:13-14: “Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré”.

Por otra parte, en Marcos 11:24: “Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá”. Este versículo reafirma y confirma lo dicho por Jesús, que no hay que temer en pedir, sino que hay que hacerlo con certeza que se concederá. Para que Dios acuda y dé lo pedido la oración debe ser verdadera y con fe.