¿Por qué es tan difícil para los creadores de 'Game of Thrones' superar la sexta temporada?

Los seguidores de la saga basada en La canción fuego y hielo de George R. R. Martin están ansiosos por saber lo que pasará en la séptima temporada de la serie de HBO que ha batido todos los records de audiencia. Sin embargo, es posible pensar que es muy difícil que esta temporada supere a la anterior.

La sexta temporada trajo muchas revelaciones y calmó la sed de venganza de muchos de los personajes, en especial de las mujeres.

La mejor venganza fue la de Cersei Lanister, quien acabó con el séquito religioso que la perseguía, y de paso acabó con los hermanos Loras y Margaery Tyrell, y con todos los asistentes de su juicio. El Gran Septo de Baelor junto a sus acompañantes ardieron gracias a las reservas de wildfire que hay bajo la ciudad del Desembarco del Rey. Todo apunta a que Cersei toma el trono con esa monumental explosión verde.

La rubia Lanister no pudo evitar el suicidio de su últomo hijo vivo, Tommen, porque estaba ocupada de una de las monjas del Gorrion Supremo que la torturó. Al hablarle demostró su filosofía de vida: "Confiesa. Confiesa que te gustó pegarme, hacerme pasar hambre, asustarme y humillarme. No lo hiciste porque te importara mi expiación. Lo hiciste porque te gustó. Lo entiendo. Yo también hago cosas porque me hacen sentir bien. Bebo porque me gusta. Maté a mi marido porque me gustó hacerlo. Me acuesto con mi hermano porque me gusta, incluso confesar me resulta divertido en la ocasión adecuada (...). Te dije que mi cara sería lo último que vieras al morir, ¿te acuerdas?".

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Arya Stark logró dominar el arte de los mil rostros y vencer a su contrincante, la niña abandonada. Pero además de eso, consiguió vengar la muerte de su hermano Robert y de su madre cuando asesinó a los hijos de Walder Frey y se los dio de desayuno a su padre.

Otra de las que pudo desquitarse fue Sansa Stark, quien vio cómo moría Ramsay Bolton. Sin duda Sansa disfrutó ver cómo los perros de su esposo lo despedazaban.

Daenerys, la que no arde, prendió fuego a los líderes Dothraki y como es su costumbre se quedó con un gran ejército.

Después de esta jugosa dosis de venganza, también hubo muchas revelaciones que podrían dar a los espectadores una idea de lo que pasará y que a su vez era lo que muchos querían saber.

La vida  por fin le sonríe a Jon Snow, empezando porque vuelve a la vida gracias al señor de la Luz y a la bruja roja, pero además vuelve a poner la bandera Stark en Winterfell gracias a su épica victoria frente a la casa Bolton. También se descubre, al parecer, que no es el hijo bastardo de Ned Stark, sino de su hermana Lyanna, con -probablemente- Rhaegar Targaryen, el hermano mayor de Daenerys y el posible heredero legítimo del trono de hierro.

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Así mismo Snow es declarado rey del Norte. Lady Mormont le dice: "No me importa si es un bastardo. Hay sangre Stark corriendo por sus venas. Es mi rey desde este día hasta el último". Y todos terminan gritando: "El rey del Norte".  

Después de todas estas satisfacciones que dejó  la sexta temporada será difícil que las escenas de la séptima puedan superar lo que ya se ha visto. Aunque no cabe duda de que todos los seguidores de la serie quisieran ver la guerra entre las reinas Daenerys y Cersei. Khaleesi tiene una pequeña ventaja, cuenta con los apoyos de los Greyjoy, los Tyrell que han sobrevivido, una flota enorme, un ejército de Dothraki, sus tres dragones y dos de los mejores consultores políticos y estrategas en los que podemos pensar: Varys y Tyrion.

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También sería satisfactorio ver el posible reencuentro entre entre Sansa y Arya, y la guerra entre el rey del Norte y los caminantes blancos es una batalla muy esperada. A fin de cuentas, todavía hay más de un trono en juego.