Cultura
Según la Biblia, ¿es pecado la masturbación?
El término es definido como la estimulación manual de los órganos genitales para obtener placer.
El concepto de masturbación tiene qué ver con la autoestimulación física de los genitales o partes erógenas del cuerpo, en que no necesariamente se llega al orgasmo, pero sí se busca el placer sexual. Muchos expertos y profesionales de la salud destacan sus beneficios, entre ellos, que ayuda a reducir el estrés y la tensión, además de que le permite a cada persona conocer su propio cuerpo.
Y, aunque es algo de lo que se habla más seguido, sin el temor a ser juzgado o señalado, hay quienes siguen percibiéndolo como algo inadecuado. Ante los tabúes y mitos, el recurrir a la Biblia para conocer si la masturbación es un pecado o no, es una opción que se puede colocar encima de la mesa.
De acuerdo con el sitio web Compellingtruth.org, en ninguna parte de las Sagradas Escrituras habla sobre la masturbación, “ni establece específicamente si es o no un pecado”, sin embargo, “la ausencia de una declaración clara en la Biblia no indica necesariamente que un acto no sea pecaminoso”.
Es decir, el hecho de que no exista explícitamente un pasaje bíblico donde diga que “la masturbación es un pecado también hace imposible dar un argumento de que la masturbación es un acto pecaminoso”.
Por ejemplo, en 1 Corintios 6: 12 dice que: “Todas las cosas me son lícitas, más no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, mas yo no me dejaré dominar de ninguna”. Ante ello, el portal Exploregod, precisó que “mucha gente ha llegado a creer que la masturbación es permisible en ocasiones e inclusive puede ser beneficiosa”, eso sí, evitando que se convierta en un comportamiento compulsivo e incontrolable.
De hecho, Sanitas explica que esta práctica “forma parte del tratamiento de determinadas disfunciones sexuales, como la anorgasmia o la eyaculación precoz, con el objetivo de aprender a conocer la propia sexualidad y la mejor manera de estimularse para llegar al orgasmo o, en el caso de los hombres, aprender a controlar la eyaculación”.
Sin embargo, muchos otros están en desacuerdo sobre la masturbación, ya que consideran que es una forma de inmoralidad sexual que no honra a Dios. Incluso, en un versículo de la Biblia, 1 Corintios 6: 18-20, señala que, “Huyan de la inmoralidad sexual. Todos los demás pecados que una persona comete quedan fuera de su cuerpo; pero el que comete inmoralidades sexuales peca contra su propio cuerpo. ¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; fueron comprados por un precio. Por tanto, glorifiquen con su cuerpo a Dios”.
Exploregod agregó que, “los críticos afirman que la masturbación crea un hábito egoísta que hace que la intimidad entre las parejas sea más difícil de lograr, porque la necesidad mutua de uno por el otro se vuelve innecesaria. Además, la facilidad de alcanzar el orgasmo a través de la masturbación con frecuencia engendra un patrón adictivo. Este acto fácilmente puede usurpar el papel íntimo y la relación de un cónyuge o el deseo de buscar el bienestar sexual de la otra persona”.
Por último, los portales aseguran que lo mejor es entablar una comunión con Dios y fortalecer las relaciones con el Todopoderoso, con el fin de alejar pensamientos como el de la masturbación.