Television

Suspenso a la colombiana

'RCN' rescata el género de misterio, una novedad refrescante entre tantas telenovelas.

30 de noviembre de 2003

Lunes a viernes
9:30 p.m. Canal RCN

Estreno: 18 de noviembre de 2003
Dirección: Kepa Amuchastegui.



En un supermercado, una mujer le presta a un hombre 2.000 pesos que le faltan para pagar la cuenta. Al salir, ella se resbala y éste la lleva a su casa por gratitud. Terminan juntos en la cama y él, sin saber cómo, la asesina. Tira su cuerpo a un río y al otro día recibe una nota: "No me gustó lo que hiciste con mi cadáver". Empieza así, la pesadilla de Fernando, un ingeniero hogareño y enamorado de su esposa y de su hija pequeña. Se trata de Punto de giro, la nueva serie colombiana de suspenso escrita por Mauricio Navas y Mauricio Miranda.

Como un gancho busca arrastrar a los televidentes a través del misterio de sus 52 capítulos en los que un hombre casado debe pagar caro una noche de pasión con una desconocida. Además tiene que vivir con la culpa de un asesinato que no entiende cómo sucedió y perseguido por una mujer muerta que parece estar viva o viceversa. La intriga lleva al público a no perderse ningún capítulo.

Con dos semanas al aire se postula como una interesante novedad para entretenerse. Los protagonistas, Alejandra Borrero y Roberto Cano, están acompañados por Cristina Umaña, Fabio Rubiano, Rodrigo Candamil, Ana María Kamper, Consuelo Luzardo, Carlos Hurtado, María Emilia Kamper, Carlos Duplat y Geraldine Zivic.

Este género de suspenso, tan poco explorado en Colombia, tiene como antecedente más cercano la exitosa serie de 1997, La mujer del presidente, también de Navas y Miranda. La crítica la ha considerado como la mejor en la década del 90. Sin embargo, Punto de giro nace de la pregunta de estos dos libretistas sobre la cinta Atracción fatal: ¿qué hubiera pasado si el personaje de Glenn Close, la obsesiva amante de Michael Douglas, no hubiera muerto ahogada en la bañera? Así, este nudo dramático de un asesinato absurdo le otorga a RCN un share medio de 29,5 por ciento; es decir 1.332.000 televidentes. Y es favorito entre las mujeres (ver gráfico). Concentra la mayor audiencia en el centro del país y en la zona cafetera.

Tiene una escenografía fría, simple y plana que no deja distraer la atención del misterio. Cuenta con una forma original de contar la trama que consiste en dividir la pantalla para mostrar lo que sucede en dos lugares de tensión al mismo tiempo, con una narrativa prestada del cine. Josefina Severino logra lo buscado con los ruidos, la música y el jadear de las respiraciones. En general, un buen intento por mantener la atracción del público noche tras noche como si estuviera frente a la pantalla de cine.