Este 27 de octubre llega a las salas de cine del país ‘Hicimos una película’, una producción realizada por personas en comunidad utilizando sus recursos propios y algo que la mayoría de personas tienen: un celular.
Aprovechando la cotidianidad de sus realidades, la diversidad de su cultura y su creatividad para contar historias, más de 500 participantes de una serie de talleres de producción audiovisual crearon cortos argumentales donde las historias tienen un elemento importante: transformar el tejido social.
SEMANA habló con Miguel Urrutia, director de ‘Hicimos una película’, y señaló cómo nació la idea de desarrollar esta producción.
“Este es el resultado de más de 10 años de taller. Llegó un momento en que me empecé a quedar corto, sobre todo por la parte de postproducción. Y el experimento que decidimos hacer fue: ¿qué tal si poníamos el reto a los participantes de mis talleres de transmitir en vivo y en directo el corto que se crea? Yo pensé que era un reto imposible. Básicamente, era decirle a las personas, usted tiene tres días para crear una historia, para ensayar así nunca haya estado frente a una pantalla. Y además va a tener el reto de transmitirlo por las redes sociales para que su comunidad, sus familiares y sus amigos lo vean. Y que fuera una historia increíble, capaz de cambiar el tejido social”, cuenta.
El 90 % de todo el material en la película es creado con celulares de gama media, en un soporte tipo gimbal para celular, sin luces ni equipos adicionales. El sonido de la producción fue registrado con micrófonos de solapa para celular.
Las historias de los cortos fueron construidas en menos de tres horas. Y lo más destacable del proyecto es que el rodaje de tan solo tres días incluye algunos cortos realizados en una sola toma.
“La película narra de forma cronológica todas las experiencias de estas personas que participaron en los talleres, pero al mismo tiempo lo que estás viendo son 10 cortos magistrales, de verdad son cortos que podrían ser tesis en cualquier lugar. El cemento que une la película son esas experiencias de vida de estas personas: cómo asumen el reto y cómo logran sacarlo adelante. Son cortos argumentales completos que tienen pedazos de detrás de cámaras con estas experiencias de vida, entre cada uno de los bloques. Y también tiene una estructura de tutoriales”, detalla el director.
Aprender a desarrollar historias con solo un celular es lo que más resalta Urrutia, quien durante varios años ha estado formando a personas en este campo. Uno de los resultados que más destaca de esta película y todo el proyecto que la hizo posible es la creación de un nuevo festival.
“El final de la película es muy emotivo porque creamos el primer festival de cine trasmitido en vivo y en directo. Esto es un formato de festival que no existía antes en ningún otro lugar del mundo y ahora es lo que estamos tratando de fomentar, porque es cambiar el concepto de la producción a adecuarnos a la inmediatez que están pidiendo las redes sociales en esta época contemporánea. Y para mí ese es uno de los aportes importantísimos que da el proyecto. Cómo personas de lugares muy apartados, de pueblos que digamos no tienen oportunidades, terminan convirtiéndose en éxitos virales gracias a sus historias y al talento que tienen y solamente con un celular”, explica.
Urrutia resalta que uno de los objetivos de ‘Hicimos una película’ es inspirar a las personas a que utilicen su celular para contar historias y mostrarse al mundo. Demostrar que así como ellos pudieron hacerlo posible, cualquier persona con solo un celular también puede hacerlo. “La invitación es ver y aprender de ella”, agrega el director.