Gafas de realidad aumentada, pantallas transmitiendo videos en 360 grados y charlas en las que se analiza cómo se convierten en música algunas patologías del corazón, son algunas de las llamativas muestras tecnologías que ofrece el Centro de Experiencia Música y Tecnología, el cual figura como novedad en esta decimotercera edición del Cartagena Festival Internacional de Música. Del 10 al 12 de enero, las más de 25 actividades que incluyen experiencias musicales, conversatorios, talleres, demostraciones y espacios como la sala multipropósito, la de YouTube Longe y la de realidad virtualidad, tendrán lugar en el Centro de Convenciones Cartagena de Indias, por el costado del Auditorio Getsemaní. El Centro de Experiencia fue una idea que nació con el propósito de potenciar la temática de esta edición, materializar el concepto de la relación entre la ciencia y la tecnología e involucrar a un público más joven que se deje atrapar por la curiosidad y el gusto de aprender. Para Carolina Rodríguez, directora de escenario del equipo productor de la Fundación Salvi (organizadora del Festival), la acogida por parte del público ha sido bastante grata ya que se logró componer un escenario con elementos y dispositivos dinámicos, amenos y llamativos. “Aquí se viven experiencias interactivas dirigidas a un público que no necesariamente debe ser experto, pero que puede aprender mucho ya que todo es introductorio y aborda un tema tan interesante, con actividades que no suelen ser frecuentes y a las que no todos pueden acceder de forma gratuita”, comenta Rodríguez. La conferencia titulada ‘La música y la acústica del corazón’, dada por el inventor Jorge Reynolds en la tarde de la inauguración fue una de las más visitadas. Más de 150 personas sintieron los ritmos de algunas patologías del corazón, mientras un grupo de tamboreros los interpretaban al unisonó con la explicación del ingeniero colombiano. En promedio, se podría pasar la tarde completa en el Centro de Experiencias haciendo un recorrido desde el salón 103, donde está el YouTube Lounge, hasta la sala de realidad virtual, situada en el segundo piso al lado del Auditorio Getsemaní. En ese cuarto blanco con luces de destellos azules, posan nueve sillas sobre las que se encuentran las Gloogle Glass, “con estos artefactos pude sentirme por primera vez en un concierto en vivo. Escuchar y verlo todo fue muy emocionante”, cuenta en la salida de la sala, Fernando Gutiérrez, cartagenero, estudiante de colegio y amante de la música.