“A todos los que no creyeron en él, que se den cuenta que sí se puede”: padre de Egan Bernal

Egan Bernal ha logrado una de las hazañas más importantes de la historia del deporte colombiano. El ciclista se coronó campeón del Giro de Italia 2021, después de una emocionante y brillante carrera. Con este, Egan consigue su segundo título en una de las grandes vueltas ciclistas, sumado a la del Tour de Francia en 2019.

Con su triunfo, miles de colombianos vibraron de emoción al presenciar tan memorable carrera. Egan, quien desde el principio se mantuvo firme y decido, con sus “piernas de elefante” llenó de orgullo a más de uno; sin embargo, fue su padre, Germán Bernal, quien desde la distancia batalló con el corazón en la mano cada etapa del ciclista.

Germán fue una de las personas más importantes en la carrera de Egan, pues fue quien le enseñó a montar bicicleta y quien lo alentó desde el primer momento a amar este deporte.

Además, él personalmente se encarga de hacerle mantenimiento a la bicicleta del corredor. SEMANA supo de primera mano que para Germán la última etapa fue muy dura, pues sentía que los minutos transcurrían cada vez más rápido; sin embargo, asegura que Egan “supo administrar la renta que tenía y lo logró”.

Por otro lado, recuerda que uno de los consejos más importantes que le dio al deportista fue “entrenar con juicio” pues esta sería la única forma de cumplir todas sus metas.

A pesar de que el padre de Egan asegura que es difícil dedicarse al ciclismo, porque en su caso no tenían los recursos necesarios para tener y mantener una buena bicicleta, señaló que después de la última cicla que ellos le regalaron Pablo Mazuera fue un gran soporte para la carrera del colombiano pues fue quien lo apoyó y ayudó bastante.

La recuperación y la gloria

Uno de los momentos más críticos que vivió Egan Bernal ha sido su retiro en la carrera del pasado Tour de Francia por los fuertes dolores de espalda que enfrentó debido a una escoliosis compleja. Por ello, todos estaban al tanto de su proceso de recuperación.

“El proceso de recuperación es complicado, tiene que hacer muchas terapias diarias para el dolor de espalda. Antes de salir a entrenar le toca hacer terapias, llegue al baño y vuelve a hacer terapias, es muy duro”, aseguro Germán.

Debido a la grave lesión lumbar, Egan y su familia llegaron a pensar que la carrera deportiva se podía ver afectada; sin embargo, gracias a las terapias ha logrado levantarse más fuerte.

“Fue un golpe muy duro, pero gracias a Dios se dieron las cosas y ahí están los resultados”, manifestó.

Egan le ha dejado muchos recuerdos positivos a don Germán, pero el que más atesora con cariño fue el día en que aprendió a montar bicicleta.

Desde el primer momento en el que Egan se montó en su primera bicicleta, Germán recuerda que la dominó como si él ya supiera y fue el momento en que dijo: “Él va a ser ciclista”.

A pesar de que estén lejos, el corredor cuenta con todo el apoyo de su familia; sin embargo, fue gracias al ánimo que recibió por parte del corredor Daniel Felipe Martínez en los momentos más complejos de la carrera que Egan logró el gran triunfo, asegura Germán.

“Muchas felicitaciones, acá lo queremos mucho, y a todos los que no creen en el ciclismo y no creyeron en él, para que se den cuenta que sí se puede”, fueron las palabras que Germán dedicó a su hijo tras el gran triunfo.