QATAR 2022
“Cábalas son cábalas”: presidente argentino confirmó que no estará en la final de Qatar 2022, ¿por qué?
A pesar de tener derecho a un privilegiado lugar en el estadio Lusail, el anuncio era esperado por sus compatriotas, pero incomprendido para el resto del mundo.
Los aficionados al futbol en todo el mundo cuentan las horas para disfrutar de la final del Mundial de Qatar 2022 entre dos selecciones históricas: Argentina y Francia. Un enfrentamiento que sin duda paralizará el planeta durante 90 minutos.
La presencia de la selección de Argentina en la final representa la última oportunidad para que Lionel Messi, a sus 35 años, tenga la posibilidad de coronarse campeón mundial, la única joya que le falta a su corona. Por esa razón, el pueblo argentino tiene el sentimiento y la pasión a flor de piel.
Por su parte, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, hizo un anuncio esperado por sus compatriotas, pero extraño para el resto del mundo. El mandatario anunció que no asistirá al estadio de Lusail, Qatar, para alentar a los liderados por Messi, todo por cuestión de “cábala”.
Es decir, el jefe de Estado no quiere que su presencia en el estadio sea vista como se le llama coloquialmente en territorio argentino “gafe” o “mufa”, que significa persona que no da “buena suerte”.
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“Como millones de compatriotas, disfrutaré la final de la Copa del Mundo en casa. Viviré este momento fantástico como hasta ahora, junto a mi gente. En la cancha van a estar los mejores de los nuestros y en la tribuna, una gloriosa hinchada. Además, cábalas son cábalas”, sentenció el mandatario.
Como millones de compatriotas, disfrutaré la Final de la Copa del Mundo en casa. Viviré este momento fantástico como hasta ahora, junto a mi gente. En la cancha van a estar los mejores de los nuestros y en la tribuna una gloriosa hinchada.
— Alberto Fernández (@alferdez) December 17, 2022
Además, cábalas son cábalas 😉🤞🇦🇷 pic.twitter.com/tCbRDWyd5n
Para comprender esta decisión del gobernante hay que retroceder la historia hasta el año 1990, cuando esa nación estaba liderada por el también peronista Carlos Menem. Ese año, Argentina llegaba a la Copa del Mundo de Italia con el objetivo de mantener la copa obtenida en el 86.
En su debut ante Camerún, la albiceleste sufrió una inesperada derrota que fue atribuida por la hinchada creyente en cábalas a la presencia de Carlos Menem en el estadio; a partir de allí se ganó la fama de “mufa”. Todo esto se sumó al fallecimiento de dos de sus ministros (Economía y Salud).
Mientras que llega la hora cero en Qatar, Alberto Fernández le deseó a su homólogo francés, Emmanuel Macron, todo lo mejor para el futuro, excepto el domingo.
“Querido amigo Emmanuel Macron, te guardo un enorme afecto y te deseo lo mejor para el futuro. Salvo para el domingo. Argentina es mi maravilloso país, ¡y es Latinoamérica! ¡Vamos la celeste y blanca!”, escribió Fernández en Twitter el jueves, en respuesta a un mensaje de Macron.
Política y deporte
El presidente francés le había escrito a Fernández al responder a un tuit del mandatario electo brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, que le deseó suerte a ambos.
En un mensaje escrito en portugués, Macron agradeció a Lula y dijo: “Querido Alberto Fernández, uno de nosotros dos tendrá más suerte. El domingo sabremos cuál de los dos. Con toda mi amistad... ‘Adelante les bleus’!”.
Argentina contará con otro apoyo inesperado, el de la mayoría de la torcida brasileña. Lula publicó una encuesta en Twitter en la que el 55 % de los participantes prefería la victoria argentina.
Gracias querido @LulaOficial por tus buenos deseos.
— Alberto Fernández (@alferdez) December 15, 2022
El fútbol latinoamericano estuvo muy bien representado por Brasil (@CBF_Futebol), @Uruguay, Costa Rica (@fedefutbolcrc), @FEFecuador, México (@miseleccionmx) y @Argentina. https://t.co/cL0gN5rWjO
La previa francesa
En lo deportivo, el seleccionador francés, Didier Deschamps, se mostró confiado en que podrá contar en la final con el centrocampista Adrien Rabiot, baja en semifinales contra Marruecos (2-0) por un resfriado y que regresó a los entrenamientos, y el central Dayot Upamecano, que también estuvo enfermo y se quedó en el banco de suplentes contra los magrebíes.
Pero los defensas Raphaël Varane e Ibrahima Konaté, así como el extremo Kingsley Coman, no participaron en el entrenamiento previsto este viernes. Este último tampoco estuvo en la sesión del jueves por “un pequeño síndrome viral”, mientras que Varane y Konaté por “probablemente un golpe de frío”, según una fuente cercana. Tampoco entrenaron Théo Hernandez y Aurélien Tchouaméni, víctimas de contusiones.
Este viernes 16 de diciembre fue anunciada la presencia de unos 6.000 aficionados franceses en el estadio de Lusail el domingo. Pero las gradas estarán probablemente más pobladas de camisetas albicelestes, ya que miles de argentinos acompañan a su selección desde el inicio del torneo.
Sin embargo, la demanda de los aficionados argentinos supera la oferta de entradas y decenas de aficionados volvieron a manifestarse este viernes delante del hotel de Argentina en Doha pidiendo ayuda para conseguir boletos para la final.
*Con información de la AFP.