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La participación de Imane Khelif empeoró las relaciones entre el Comité Olímpico Internacional y la Asociación Internacional de Boxeo
La participación de Imane Khelif empeoró las relaciones entre el Comité Olímpico Internacional y la Asociación Internacional de Boxeo | Foto: Getty Images

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Caso de Imane Khelif traería graves consecuencias para Colombia: dirigente lanzó advertencia

Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional, fue claro sobre el futuro del boxeo en los Juegos Olímpicos.

Redacción Deportes
12 de agosto de 2024

El boxeo semiprofesional sufre una de las peores crisis de su historia. Producto del choque de opiniones entre el Comité Olímpico Internacional (COI) y la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), dicha disciplina corre riesgo de desaparecer para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.

Así lo advirtió Thomas Bach, presidente del COI, en una rueda de prensa en la que se refirió al futuro del boxeo olímpico. “Nuestra posición es muy clara: el COI no organizará el boxeo en Los Ángeles sin un socio fiable”, indicó el dirigente alemán.

Bach avanzó que la decisión final de mantener o retirar al boxeo del menú olímpico se tomará “el año que viene”, idealmente en el primer semestre, sin dar mayores precisiones al respecto.

La gota que rebosó la copa fue lo sucedido con la boxeadora argelina Imane Khelif, quien fue descalificada de los mundiales de boxeo por tener altos porcentajes de testosterona en su cuerpo. El Comité, sin embargo, le permitió competir en las olimpiadas donde se llevó el oro en la categoría de los 66 kilogramos.

Tras la pelea de primera ronda contra la italiana Angela Carini, la IBA se pronunció en contra de Khelif y manifestó tener pruebas suficientes para demostrar que “es hombre”. Dichas declaraciones cayeron mal en el seno del COI, que lleva varios años de intensa batalla contra la IBA, al punto que en Tokio 2020 le retiró la responsabilidad de organizar el certamen como lo hacen las federaciones de los otros deportes.

La entidad presidida por Bach fue clara al respecto de la única forma de mantener el boxeo como deporte olímpico. “Si las federaciones nacionales quieren que sus atletas puedan ganar medallas olímpicas, deben organizarse en torno a una federación internacional fiable y con buen gobierno”.

“Tienen el futuro del boxeo olímpico en sus propias manos, y las acciones requeridas no pueden ser más claras”, completó el COI.

Imagen de la corta pelea entre Imane Khelif y Angela Carini
Imagen de la corta pelea entre Imane Khelif y Angela Carini. | Foto: Getty Images

Graves consecuencias para Colombia

En caso que las advertencias de Bach se cumplan y el boxeo esté ausente en Los Ángeles 2028, uno de los países que más sufriría con esa decisión es Colombia, que a lo largo de su historia ha tenido un buen número de medallistas en esta disciplina.

En Múnich 1972 se consiguieron dos medallas de bronce a través de Alfonso Pérez y Clemente Mendoza y en Seúl 1988 se logró otro tercer lugar en los puños de Jorge Julio Rocha.

Las medallas del boxeo olímpico se multiplicaron en Río 2016: Yuberjén Martínez fue plata en la categoría de 49 kilogramos masculino, antes de que Ingrit Valencia hiciera lo propio con un bronce en los 51 kilogramos femenino.

Este año en París 2024, Colombia tuvo varios representantes en distintas categorías y aunque no se sumó medalla, sí hubo diplomas olímpicos por medio de Angie Valdés, Yeni Arias y nuevamente Ingrit Valencia.

Kazakhstan's Nazym Kyzaibay (L) and Colombia's Ingrit Lorena Valencia Victoria at the end of the women's 50kg quarter-final boxing match during the Paris 2024 Olympic Games at the North Paris Arena, in Villepinte on August 3, 2024. (Photo by MOHD RASFAN / AFP)
Ingrit Valencia aceptó la derrota frente a su rival en cuartos de final | Foto: AFP

Después de la halterofilia y el BMX, el boxeo es la tercera disciplina que más medallas le ha dado a Colombia en su historia en los Juegos Olímpicos (5).

El deporte de las ‘narices rotas’ debutó en los Juegos Olímpicos modernos en San Luis 1904 y se ha mantenido desde entonces con la única excepción de 1912 en Estocolmo, debido a que las leyes suecas prohibían practicarlo en ese entonces.

Dirigida desde finales de 2020 por el ruso Umar Kremlev, y financiada en gran parte por el gigante gasístico ruso Gazprom, la IBA perdió definitivamente el reconocimiento olímpico el año pasado.