Caterine Ibargüen se coronó en el triple salto de la Copa Intercontinental

La colombiana Caterine Ibargüen sigue imparable en el salto triple y una semana después de imponerse en la Liga de Diamante, sumó un nuevo triunfo en el triple salto de la reunión de la Copa Intercontinental IAAF de atletismo que se disputa en la ciudad checa de Otrava, en la que se impuso con una marca de 14,76 metros.

Ibargüen, campeona olímpica en Río 2016 y del mundo en 2013 y 2015, comenzó su concurso con 14,31, siguió con 14,23 y alcanzó los 14,76 en su cuarta tentativa tras hacer nulo en la tercera. En la quinta y última se fue hasta 14,54. Sumó 8 puntos para el equipo de las Américas que capitanea Mike Powell.

Su verdugo en la final de Londres 2012, la kazaja Olga Rypakova, en representación de la zona de Asia-Pacífico, fue segunda con 14,26 metros, mientras que Paraskevi Papachristou, del equipo de Europa, alcanzó los 14,22.

No hubo lugar a la sorpresa en la carrera masculina de 400 metros vallas, ya que el dominador del año, el catarí Abderrahman Samba, obtuvo una clara victoria, su novena de la temporada en otras tantas carreras. Su tiempo de 47.37 iguala el récord de la Copa Mundial/Continental establecido por el estadounidense Edwin Moses en Roma hace 37 años.

La carrera de Samba completa su notable serie de esta temporada, en la que bajó de 48 segundos en cada final que ha disputado. Logró la victoria en seis carreras de la Liga de Diamante de la IAAF y se llevó el oro en los Juegos Asiáticos.

El jamaicano Annsert Whyte fue segundo en 48.46 y el noruego Karsten Warholm, tercero con 48.56.

El campeón mundial y olímpico de 3.000 metros obstáculos, el keniano Conseslus Kiptuto, impuso su ley en Ostrava con una marca de 8:22.55, en una prueba en las que el español Fernando Carro, subcampeón de Europa, acabó cuarto con una marca de 8:33.76.

En el hectómetro femenino, la marfileña Marie Josee Ta Lou logró la victoria en 11.14 para convertirse en la primera mujer africana que gana esta prueba en la Copa Intercontinental, creada en 1977.

El brasileño Darlan Romani dio la sorpresa en lanzamiento de peso al ganar el oro con un tiro de 21,89 metros. Superó en la final al campeón mundial, el neozelandés Tomas Walsh, segundo con 21,43. Tercer fue el polaco Michal Haratyk con 21,36.

En el 800, victoria del favorito, el keniano Emmanuel Kipkurui Korir, en 1:46.50, lejos de la mejor marca del año que él mismo posee (1:42.05). Ganó en un ajustado sprint con el estadounidense Clayton Murphy, bronce en Río 2016, y el subcampeón olímpico en Rúio 2012, el botsuano Nijel Amos, ambos en 1:46.77.

Tras la primera jornada el equipo de las Américas lidera el torneo con 135 puntos. El de Europa es segundo con 123, el de Asia-Pacifico marcha tercero con 89 y cierra la tabla, con 74, el de África.