La millonaria indemnización que le pagarían a Jorge Enrique Vélez

En la Asamblea de la Dimayor se confirmó la salida de Jorge Enrique Vélez, que varios clubes venían pidiendo durante los últimos meses por su cuestionable gestión como presidente de la entidad.

Vélez habría llegado a un acuerdo de 600 millones de pesos de indemnización, remuneración a la cual los clubes habrían accedido para evitar enfrentar un pleito que podría extenderse en un momento en el que requieren concretar el regreso del campeonato.

La cifra legal para el final del contrato hubiera sido muy inferior, ya que según la ley colombiana corresponde a 35 días de salario cuando se presenta un despido unilateral.

Lo más insólito es que el pedido de indemnización de Vélez habría sido por "daños a su moral", relacionados con las críticas que recibió durante su gestión.

"Lo que él considera han sido unos daños a su moral, digamos alguna forma para expresarlo (...) Su salida se dará cuando se llegue a un acuerdo de lo que puede ser la indemnización de la Dimayor, una bonificación; de esa forma, yo pienso que él renunciaría", había dicho Carlos Ferreira, presidente de Alianza Petrolera.

Las principales motivaciones para la salida de Vélez fueron problemas con el contrato de los derechos de televisión a nivel internacional y su falta de capacidad de gestión durante la pandemia.

Muchos clubes esperaron tener al Ministerio del Deporte como aliado, pero en lugar de esto se presentaron discrepancias entre las dos entidades.

Por ejemplo, Vélez dijo antes de la aparición del canal premium que si el Gobierno quería fútbol por televisión abierta, tenía que mandarle "la factura".

"Hablé con el ministro de Hacienda... eso es inconstitucional. Hoy el fútbol, mañana el cine. Estas son empresas privadas. Hablé con alguien del Gobierno y le dije: no hay problema, adónde le mando la factura. Si el Gobierno quiere asumir lo de los colombianos, les mando la factura. Pero gratis no puede ser. Si el Gobierno quiere sacar de su presupuesto, pues les vendemos", dijo en el programa ‘En la Jugada‘, de RCN Radio.

Ya cuando se desató la pandemia, la Dimayor gestionó renuniones con miembros del Gobierno diferentes al Ministerio del Deporte, como un encuentro virtual con miembros del Ministerio del Trabajo, Álvaro Uribe y la bancada del Centro Democrático, que se habría entendido como una forma de ejercer presión para permitir el regreso del deporte.

El encuentro generó suspicacias, pues según algunos especialistas se trataba de una manera de poner presión al ministro del Deporte, Ernesto Lucena, para que agilice este proceso y facilite las condiciones del retorno del fútbol.

"Aquí no se trata de presiones, ni mucho menos de actitudes políticas. Tenemos que tomar esta decisión con base en la ciencia, en lo que dicen los epidemiólogos, los infectólogos y los deportólogos”, dijo el presidente Iván Duque en su programa diario de ‘Prevención y Acción‘.

Luego se conoció una carta que envió el ministro del Deporte, Ernesto Lucena, al presidente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), Ramón Jesurún, en la que anuncia que de ahora en adelante se entenderá únicamente con esta entidad, y no con la Dimayor, para tratar los temas relacionados con el regreso del fútbol.

"Me permito manifestarle, presidente Jesurún, que a partir de la fecha es indispensable que cualquier comunicación, decisión o solicitud se maneje en forma directa y exclusiva entre la presidencia de la Federación Colombiana de Futbol y el Ministerio del Deporte (...) Lo anterior tiene como único fin garantizar un manejo oportuno y responsable de todas las decisiones que para el fútbol profesional colombiano debamos tomar, por la actual situación derivada de la covid-19", decía la carta.

Posteriomente, el ministro Ernesto Lucena expresó su descontento luego de que la Dimayor publicara que destinó 1.400 millones de pesos para la realización de la Liga femenina, cuando este dinero es un aporte del Ministerio del Deporte y la Vicepresidencia de la República.

La controversia empezó por cuenta de un trino de la cuenta de la Dimayor, a las 10 de la mañana del 8 de julio, que decía: “Para la realización de la Liga femenina 2020 la Dimayor destinó $1.400 millones", y solo 3 horas después aclararon que estos recursos venían de parte de los entes gubernamentales anteriormente mencionados.

Fue tal la confusión que causó la publicación, que la jugadora de la Selección Colombia Nicole Regnier creyó que los recursos para la Liga femenina iban a ser de 2.800 millones de pesos, cuando en realidad actualmente solo se cuenta con los 1.400 aportados por el Gobierno.

En el programa ‘Zona libre de humo‘, Lucena se refirió a lo sucedido manifestando que la Dimayor se “pifió” por esta manera de comunicar la noticia, que fue muy bien recibida por los aficionados del fútbol femenino.

“Yo creo que fue una equivocación. Como diríamos en el argot del fútbol, una pifia. Los 1.400 millones son del Ministerio del Deporte, los tiene el ministerio en este momento”, señaló Lucena.

El ministro también aclaró que estos recursos aún no están en poder de la Federación, pues primero se debe justificar cómo va a ser utilizado antes de su entrega.

El reemplazo de Vélez es Daniel Cardona, hasta la fecha secretario general de la Dimayor y ahora presidente encargado. El 7 de agosto se definirá el nuevo presidente de una amplia baraja de candidatos.