DEPORTES
"Mi papá me gustaba por lo agresivo en pista”: Sebastián Montoya
El hijo de Juan Pablo Montoya busca seguir los pasos de su padre. SEMANA habló con él.
Sebastian Montoya, hijo del expiloto de Fórmula 1 Juan Pablo Montoya, iba a dar el paso más importante de su naciente pero fulgurante carrera en el 2020 cuando iba a dar el salto de los karts a los carros tipo Fórmula.
El adolescente de 15 años tenía planeado competir en el verano europeo en la Fórmula 4 italiana, una de las competencias más difíciles de este tipo y donde buscaba demostrar su talento después de brillar en los karts.
Pero se desató la pandemia del coronavirus por lo que su participación en el campeonato automovilístico que fue reprogramado para el mes de agosto sigue siendo incierta.
El joven cuenta con el apoyo de la Escudería Telmex Telcel y Claro e iba a disputar la Fórmula 4 con la escuadra italiana Prema, que tiene presencia en las categorías semilleros del automovilismo europeo.
Mientras tanto, Sebastian sigue en Miami, donde ha aprovechado para participar en carreras de simulador que fue la alternativa de los corredores en el mundo cuando se pararon las carreras.
SEMANA habló con él sobre su experiencia en la cuarentena, sus expectativas en su carrera, la relación con su papá y su relación con Colombia.
SEMANA: ¿Cómo ha vivido la pandemia?
Sebastián Montoya: Esa cuarentena ha sido difícil no solo para mí, sino para todo el mundo. Ahora después de 3 meses está empezando a abrir. Justo cuando iba viajar a Alemania para empezar la temporada en Europa cerraron en Italia y nos tocó quedarnos en Estados Unidos.
Cuando sucedió todo acá salí por la noche el miércoles para una competencia, practiqué el jueves, el viernes hice dos prácticas en las que fui el más rápido y luego cancelaron el fin de semana y empezó el encierro. Fue algo muy duro que pasó.
No he manejado el carro y todos los demás ya están entrenando allá
SEMANA ¿Por qué tomó la decisión de ir a la Formula 4 italiana, que es una de las más difíciles?
Mi papá siempre me ha dicho que si uno quiere ser mejor y hay que competir contra los mejores. Si uno es futbolista trata de ir al Barcelona, Real Madrid, Juventus. Nosotros estamos en lo más duro para aprender mucho. Me he ganado el Winter tour, he ganado en Europa, en el Mundial he estado adelante y he ido aprendiendo poco a poco.
El equipo en el que estoy se llama Prema PowerTeam y es uno de los más importantes, en el que ha estado los hermanos Lecrerc, los hermanos Schumacher y otros pilotos muy importantes a nivel mundial.
Su papá dice que usted es igual de agresivo, pero más inteligente para correr, ¿está de acuerdo?
S.B.: No soy todavía inteligente 100 %, pero en mi mente soy rápido porque si uno empieza a dudar empiezan los problemas. Un ejemplo fue en el mundial de Karts estábamos muy rápidos, largué 25 y cuando llegué a los 10 intente llegar adelante y ahí empezaron los errores.
En el futuro me veo muy inteligente, pero más agresivo como un Max Verstappen. Me gusta preguntarle cosas a mí papá, Verstappen es un piloto bueno para ganar carreras pero no tiene para luchar por el campeonato. Por ejemplo, el año pasado en Spa que salió atacar en la primera curva
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La primera vez mi papá me dijo que si uno piensa qué puede pasar empieza a ir lento. A mí me va bien en los callejeros, porque soy agresivo y tratar de maximizar el espacio.
La estrellada de Antoine Hubert fue algo terrible pero es la realidad del deporte. Su murió haciendo lo que le gusta y eso es lo positivo, y yo lo veo así, ojalá no me pasé, pero es mi idea.
SEMANA: ¿Cuál es su ejemplo a seguir en las pistas y por qué?
S.B.: Son varios. Mi papá me gustaba por lo agresivo en pista, mi papá se le tiró a Michael Schumacher en su segunda carrera. Max Verstappen también me gusta. Lewis Hamilton que ganarse seis campeonatos del mundo es increíble y es dominante. Ayrton Senna por su dedicación y Charles Lecrerc que mentalmente es muy fuerte.
En Baku cuando murió su papá fue de último a ganarse la carrera. Lo he podido conocer de cerca es muy querido y les ha tocado muy difícil.
SEMANA: Usted menciona varios pilotos muy jóvenes, ¿Cree que ahora es más fácil que se le dé la oportunidad de llegar a la F1 con su juventud?
S.B.: Por ejemplo a Lando Norris lo cogieron de 15 años en Mclaren. Yo honestamente no estoy pensando en eso, porque genera presión. Sin embargo, me gustaría estar en Ferrari, Mclaren , Red Bull que son los más rápidos del campeonato.
SEMANA: Los pilotos en la actualidad se preparan mucho físicamente, ¿hay un cambio con respecto a la época de su papá y cómo se prepara usted?
S.B.: Cuando estaba mi papá el físico era más importante. Antes era más duro porque ahora el timón es liviano lo que generaba muchos G en la frenada. Me decía que en la frenada la cabeza iba para abajo porque parecía manejando una nave espacial y cuando frenas es como un muro.
Debo entrenar mucho, todos los días siempre hago mucho ejercicio. Entre más hago es mejor y el resultado se ve en las carreras.
SEMANA: En las últimas semanas ha usado mucho el simulador, ¿Cómo son los duelos con su papá?
S.B.: Yo aprendo mucho eso. En las carreras de simulador mi papá me ayuda. Cuando corro contra mi papá esa realidad es difícil y se pone grave la situación (risas). Mi papá al principio me ganaba por mucho, pero ahora gracias a él estoy aprendiendo.
Nosotros hacemos unas carreras con mi patrocinio de AIS y recuerdo que una vez estábamos haciendo una carrera en Spa con Mercedes y me tocó largar octavo y mi papá estaba adelante, me le metí por adentro y lo pasé, pero luego me pegaron, tiré los audífonos y había sido él. Sin embargo después me sentí orgulloso, pasé a Juan Pablo Montoya, que corrió contra los mejores de la historia.
SEMANA: A pesar de tener el apellido Montoya, ¿necesita mucho apoyo para progresar en su carrera?
S.B.: El apoyo en este deporte es todo, con el nombre Montoya no basta, toca tener la plata, el apoyo de Telmex y Claro es clave porque a pesar de mi nombre es difícil para nosotros. Es complejo porque mi papá está corriendo y en la casa también están mis hermanas. El patrocinio nos ayuda mucho. Ellos le ayudaron a mi papa a llegar a la Fórmula 1 y espero que pueda pasar igual conmigo.
SEMANA: ¿Qué tan importante es Colombia para usted?
S.B.: Colombia para mí es un descanso de mi vida normal. No voy mucho solo para vacaciones, navidad y año nuevo, pero es como mi segunda casa. En Miami estoy trabajando, pero en Colombia es tiempo para mí. Vamos a fincas y nos desconectamos. Montamos caballos, motos, salgo a correr, es libertad pura. La comida de Colombia (uuf que rico), ni una pizza se compara con la comida de Colombia. No voy mucho tristemente.
SEMANA: Su papá podría convertirse en uno de los pocos corredores en alcanzar la Triple Corona (ganar el GP de Mónaco, Indy 500 Y Le Mans) si gana en Le Mans, ¿qué piensa de su postura frente a este posible logro?
S.B.: Es muy chistoso, yo digo que no lo tiene que hacer porque mi papá no corre para ganar sino porque le gusta. Todo el mundo se preguntó porque dejó la Formula 1, pero él se fue a Nascar por un contrato de 7 años y dar un salto pocas veces visto y luego hizo lo mismo con Indy Car. Me fascinaría que corriera LeMans, pero si lo hace es para ganar pero es difícil en las circunstancias actuales porque él corre con Acura y el equipo dominante es Toyota, que tuvo los cuatro mejores carros en la edición pasada.
SEMANA: ¿Qué va a pasar con su temporada en Europa¡
S.B.: Hasta ahora no sé depende cómo evolucionen las cosas En mi Instagram publicó todo lo que sepa, ahora me llegó un horario. Mi primera carrera está programada en agosto.
SEMANA: ¿Qué mensaje les envía a los colombianos que aspiran a ver otro Montoya en la Formula 1?
S.B.: Les digo a todos que me apoyen que juntos vamos a poder cumplir este sueño.